Otro día de colas y desespero se vivió en los municipios Simón Rodríguez, Guanipa y Anaco del estado Anzoátegui, donde las personas se mantenían “mosca” y haciendo guardia frente a los negocios, a la espera de comprar electrodomésticos y ropa a menor costo, publica El Tiempo.
En El Tigre, la mayor tensión se presentó en los alrededores del comercio Los 777, ubicado en la avenida Miranda. Allí, desde el sábado, la Guardia Nacional Bolivariana tomó las instalaciones.
Después de cuatro días, ayer los efectivos militares, junto con funcionarios del Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios (Indepabis) y Superintendencia Nacional de Costos y Precios (Sundecop), Seniat y Comisión Presidencial ordenaron, a las 12:00 del día, abrir las puertas del negocio, mientras socios, familiares y trabajadores protagonizaron escenas de llanto y dolor.
“Yo prefiero que la gente entre y nos saquee, nos sale más barato. ¡Por Dios, esto es un irrespeto, es nuestro dinero. No me dejen sin nada!”, expresó el hermano del dueño de la tienda, Hakim Riffai, entre lágrimas y gritos.
El hombre de origen árabe estaba desesperado porque las autoridades, después de la revisión que realizaron, habrían detectado que los electrodomésticos tenían 260% de aumento de precio.
Riffai manifestó, en su poco fluido español, que era primera vez que le pasaba algo así: “¿Por qué ahora? Nunca había pasado antes. Yo compré a 60 mil bolívares (se refería a la última mercancía que le llegó). No puedo venderlo a seis”.
En medio de la conmoción, el comerciante fue sacado del establecimiento por efectivos de la GNB y llevado a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), donde permanecerá retenido preventivamente. Quedó a la orden del Ministerio Público.
Carmen de Marín, una de las trabajadoras del negocio, dijo que lleva 10 años laborando y aseguró que los propietarios trabajan día y noche sin “quitarle nada a nadie. Tenemos factura de todo. No es posible que se venda lo que se compró caro a precios viejos”.
Después de realizar la inspección las autoridades acordaron darle 70% de descuento a todos los electrodomésticos, pese al rechazo de los dueños y trabajadores del comercio quienes decían que la mercancía recién adquirida no podía venderse a un precio tan bajo.
Estaban de acuerdo que se ofertara las que eran de vieja existencia.
En las afueras del establecimiento, Jesús Figuera, candidato oficialista a la Alcaldía de Simón Rodríguez, tomó la vocería de las autoridades presentes. Allí aseguró que en el comercio hallaron “ilícito cambiario, ilícito de remarcaje, gananciales desproporcionados, usura genérica por incremento de 260%, además de oferta engañosa”. Mostró una etiqueta en donde se apreciaba un costo de un TV Led Samsung 3D de 60 pulgadas, con un precio con tarjeta de crédito (Bs 124.299,89) y con efectivo (Bs 112.9889, 90).
El oficialista dijo que los trabajadores no quedarán afectados, porque seguirán en sus labores, ya que no se trata de una expropiación. Informó que la tienda tenía en sus galpones 20 mil electrodomésticos que serían vendidos. El Seniat se encargará del sistema de venta, ya que no permitirán que una persona compre más de un mismo artículo.
La trabajadora Gregorina Suárez dijo que desde hace siete años labora en Los 777 y que teme quedar sin su empleo. No cree que sea justa la forma cómo arremetieron contra los dueños.
A partir de las 2:30 pm hubo intento de saqueo en el local.
Llaman a la calma
La coordinadora de la oficina del Indepabis en Anaco, Amarilis Rondón, durante el recorrido que hicieron ayer por el sector comercial, llamó a los habitantes a la calma.
Se dirigió, sobre todo, a aquellos clientes que están apiñados en las puertas de los negocios y que quieren que les devuelvan de inmediato la diferencia en dinero por los electrodomésticos adquiridos la semana pasada con sobreprecio.
“Tienen que entender que nosotros como coordinadores no podemos obligar a los dueños a que les entreguen el dinero. Eso lo debe hacer una comisión de fiscales nacionales autorizados por el Indepabis, Sebin, Sundecop, que ya está por venir al municipio desde Caracas, a hacer las inspecciones”.
Contraloría en la calle
Cristino Reyes, vocero de la Contraloría Social de Guanipa, señaló que en el marco del llamado que hiciera el presidente Nicolás Maduro, salieron a supervisar las tiendas de electrodomésticos, ropa y zapaterías, sin descuidar la parte alimenticia. “Esto con intención de verificar que los comerciantes no especulen en la época decembrina”.
Destacó que el ente que dirige lleva dos años trabajando y espera que las personas y entes que se están sumando a la supervisión no sólo lo hagan por la coyuntura politica.
Subrayó que su contraloría es imparcial y apegada a la ley. Exhortó a todo aquel consejo comunal que quiera pertenecer al grupo de inspectores a que lo hagan.
Reyes junto con un equipo supervisó los negocios de asiáticos para verificar el precio de los productos de la cesta alimentaria.
Adicionalmente, la Oficina Municipal de Atención al Consumidor (Omarco), está atenta a cualquier irregularidad en lo que a especulación de productos se trata. Néstor González, jefe del despacho, dijo que están tomando las denuncias para comunicarlas al Indepabis regional.
Tumbaron la cerca
En la tienda Makro, ubicada en la avenida Intercomunal de El Tigre, los consumidores que estaban en las colas desde la madrugada de ayer para comprar harina y papel sanitario, tumbaron la cerca en medio de la desesperación por entrar al establecimiento.
Intento de saqueo
Después de que abrió la tienda 777 al mediodía, tuvieron que cerrarla de nuevo a las 2:30 pm. Las personas que estaban aglomeradas intentaron entrar a la fuerza. Volaron piedras y botellas, lo que dejó varios vidrios rotos y una mujer desmayada de nombre Anaís Cardona (21 años) la cual ingresó a la emergencia del hospital de El Tigre. Al parecer, quedó aprisionada cuando las personas intentaron entrar al local. El bochinche duró unas horas y luego volvió la calma y el comercio fue cerrado nuevamente en la tarde.
Gremio rechaza operativos
Anaco.- El presidente de la Cámara de Comercio de Anaco, Luis Salazar, señaló que el Gobierno Nacional debió aplicar esa medida de fiscalización no en los locales, sino primero a los mayoristas o importadores, quienes venden al detallista con sobreprecio.
“El gobierno y Cadivi saben a quién le entregaron los dólares, y esos importadores que reciben las divisas, son los que revenden los productos al comerciante y con ajustes importantes de precios”. Cree que “hacia ellos deben ir los operativos y no contra el detallista que en este momento está recibiendo toda la presión y las agresiones de la gente”.
Indicó que si obligan al comerciante a rebajar los productos un 30%, sólo tomando en cuenta las ventas brutas (sin los costos del negocio), estos van a quebrar. “Deben calcularse los márgenes de ganancia sobre las ventas netas (la venta del producto más los gastos de personal, servicios , local y otros), para que el comerciante pueda sobrevivir”.
Salazar aceptó que en cierta forma la medida es positiva para el pueblo, “pero deben buscarse la manera de no quebrar al comerciante”.