El oficialismo, a un paso de dar poderes especiales a Maduro

El oficialismo, a un paso de dar poderes especiales a Maduro

(Foto AFP)

Nicolás Maduro ya tiene la luz verde para hacerse con poderes especiales. El presidente de Venezuela, que tomó posesión de su cargo el pasado 19 de abril, podrá hacer y deshacer leyes durante un año sin pasar por el Poder Legislativo, después de que la Gaceta Oficial le asegurase el camino este miércoles para obtener la denominada Ley Habilitante, publica abc.es.

Ludmila Vinogradoff/ @ludmilavino / Corresponsal en Caracas/ABC de España

La Gaceta hizo oficial la retirada de la inmunidad parlamentaria a la diputada opositora María Mercedes Aranguren Nasiff, decidida por la Asamblea Nacional el martes en la tarde tras la solicitud del Tribunal Supremo para poder enjuiciarla por un supuesto caso de corrupción. De este modo, con el voto del suplente de Aranguren, los chavistas podrán aprobar la largamente esperada Ley Habilitante.

El diputado 99





El suplente es Carlos Flores, el famoso diputado 99, el voto que le faltaba al chavismo para conseguir las tres quintas partes de los 165 escaños de la Asamblea Nacional para dar la luz verde a los poderes especiales del mandatario. Ya tiene el camino libre.

El oficialismo acusa a exdiputada María Aranguren de supuestamente recibir 12.443.000 bolívares (1.463.882 euros) de la gobernación de Monagas como presidenta de la Inmobiliaria Monumental de Maturín para los gastos de funcionamiento de la empresa.

Aranguren, exchavista, se defendió de las acusaciones en el Parlamento. Recordó que el caso llevaba más de cinco años en la Fiscalía, pero justo ahora es acusada. «La urgencia con la que han planteado esto es descarada (…) ¿por qué no me denunciaron antes?», se preguntó. La opositora se apartó del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) el 5 de enero de 2012. «Una tiene derecho a divorciarse», señaló al denunciar la doble moral y la hipocresía que reina en el oficialismo.

En cuanto a Flores, pieza clave para que Maduro sea habilitado, es el diputado más buscado por la prensa. El Gobierno de Maduro lo estaría «protegiendo» para que no tenga ocasión de arrepentirse cuando lo acusen en público de judas y traidor.

«Mi suplente ni es revolucionario, ni practica, ni mucho menos predica; tendrán el voto 99, pero no a un militante comprometido, sino obligado, como a ustedes les gusta», dijo María Aranguren desde el banquillo de los acusados.

 Todos se preguntan para qué quiere Maduro poderes especiales. ¿Para luchar contra la corrupción y castigar a los empresarios usureros, como él ha afirmado? En realidad, no necesita estar habilitado. Aun sin estarlo, ha creado 77 tribunales especiales y 50 fiscales para castigar a los comerciantes usureros.

La oposición ha denunciado que Maduro quiere estar habilitado para perseguir a los opositores. Así tendría luz verde para emprender una cacería de brujas con todas las de la ley.

En el marco de su declaración de guerra a las empresas privadas contra la «especulación y acaparamiento», que comenzó el pasado fin de semana, Nicolás Maduro ordenó «vaciar» la tienda de electrodomésticos DAKA, en la ciudad de Valencia, lo que provocó intentos de saqueo en otros comercios y en diversas puntos del país.

El mandatario ha forzado a los comerciantes a bajar los precios a menos de la mitad con la intervención de fiscales acompañados de milicianos. Los comerciantes, temerosos del saqueo, han «tirado» los precios. En el fondo, aseguran que, al vaciarse su tienda, ya no tendrán que abrir porque ya no tienen cómo reponer la mercancía.

«A punta de pistola»

El gobernador opositor Henrique Capriles señaló que la inflación de más de 52% no se combate «a punta de pistola», como lo hace el presidente Maduro, sino generando confianza y aumentando la producción, lo cual no es el caso del Gobierno venezolano. «No creo que Maduro gane puntos a su favor impulsando la anarquía y el caos de cara a las elecciones del 8 de diciembre, aunque la gente compre neveras a mitad de precio, pero saben que estará vacía porque no hay comida. Maduro sabe que perderá (60% a 40% a favor de la oposición)».