Los recientes anuncios en materia cambiaria hechos por el Gobierno parecen anticipar un escenario de devaluación. Al menos esta es la visión de los economistas Luis Oliveros y José Guerra, publica El Tiempo.
Andreína Vargas /El Tiempo
El lunes el vicepresidente del área Económica, Rafael Ramírez, aseguró que el Sistema Complementario de Divisas (Sicad) será fortalecido en 2014. La medida implica que tanto las divisas por concepto de inversión petrolera, el comercio del oro (entre el Banco Central de Venezuela y productores); así como las que traigan al país los turistas, serán transadas al tipo de cambio que maneje el Sicad. Actualmente promedia Bs 11,4 en 12 subastas, una tasa 80,95% más alta que la oficial de Bs 6,30.
Oliveros indicó que los anuncios corresponden a “medidas tibias, preparativas para el ajuste que viene”. Su previsión es que las próximas cuatro semanas serán claves en la eventual decisión de devaluar.
En la misma línea se situó Guerra. Señaló que lo dicho por Ramírez “es un preludio de la devaluación” que se aplicará en el país. “Anuncios dejan muy claro que viene una maxi devaluación. Es decir una devaluación promedio mayor al 100%”, vaticinó.
Ambos coinciden en que Cadivi no desaparecerá, pues el Ejecutivo seguirá auspiciando un sistema dual, donde alimentos y medicinas y otros rubros considerados prioritarios, seguirán importándose a una tasa más baja a través de este esquema, mientras el Sicad atenderá al resto de los sectores con una cotización mayor.
Ajuste necesario
Sobre el alcance de la devaluación, Oliveros es de la opinión que uno de los escenarios más probables es que en el caso de Cadivi, la tasa pase de Bs 6,30 a Bs 10, mientras el Sicad podría llegar a Bs 17.
Guerra añadió que el Gobierno habilitó en el Sicad a los sectores oro, petróleo y turismo, porque son los que aportan dólares a la economía.
Al igual que el Ejecutivo, que cree que abrir el acceso del Sicad para quienes traigan dólares al país es primordial para estimular las exportaciones, el presidente de la Cámara Venezolana de Empresarios e Industriales del Mercosur, Deulin Faneite, calificó de positiva la revisión del sistema de subasta.
Sostuvo que abrir las compuertas facilitará la importación, exportación y cumplimiento de compromisos.
Sobre el ajuste también se pronunció el presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, quien consideró que en lo dicho por Ramírez “se aprecia una devaluación de hecho”.
El empresario también aludió al pronunciamiento sobre la activación de un debate para evaluar el alza de la gasolina.
Señaló que el Gobierno reconoce la “necesidad de diálogo” en el país al “colocar en la palestra pública una discusión sobre el aumento”.
El combustible no es revisado desde 1997, fecha desde la que está vigente un precio de Bs 0,097 para la de 95 octanos y Bs 0,070 para la de 91 octanos.
Roig refirió que el debate “debe ser incluyente, sin prejuicios y totalmente despartidizado”, y además incluir medidas que protejan del impacto a los ciudadanos.
Los cálculos de Petróleos de Venezuela indican que pierde anualmente $12,5 millardos por el diferencial entre el precio y los costos. Según Ramírez, la estatal espera recuperar lo invertido, lo que implicaría elevar entre Bs 2,4 y Bs 2,7 el litro, una subida de hasta 2.683%. Con la estimación, un vehículo con tanque de 40 litros pasará de Bs 3,88 a Bs 108 por gasolina de 95 octanos.
Medidas aisladas
Sobre los cambios en el régimen cambiario, el presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, se mostró de acuerdo, pero indicó que las mismas “no pueden se aisladas”. Cree necesario que se anuncie una política integral, que permita una vía legal de acceso a las divisas a un tipo de cambio competitivo, la despenalizar el sistema y criterios de asignación transparentes.