El fútbol americano también será beneficiario del Mundial de Brasil

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Un total de 19 buques permanecen fondeados en la bahía de Puerto Cabello sin poder atracar por negligencia de las autoridades de la estatal Bolivariana de Puertos (Bolipuertos), denunció hoy el agente naviero Humberto García.

“Desde hace un mes estos buques esperan se les asigne un muelle para atracar y desembarcar sus contenedores, pero no han logrado su propósito”, aseveró a Notimex el gerente general de Naviera Nacional C.A. (Navenca).

García indicó que los contenedores están repletos de alimentos y mercancía seca que debían venderse este mes, pero la lentitud de las operaciones portuarias y el congestionamiento del puerto no han permitido el desembarque.





Añadió que la mayoría de estos buques fue contratada por la Corporación de Abastecimientos y Servicios Agrícolas (Casa) y trae al país cereales, granos, azúcar, leche en polvo, café, harina de maíz y fertilizantes, entre otros productos.

“El congestionamiento del puerto no es mayor porque, a raíz de las fiscalizaciones y medidas extremas contra comerciantes venezolanos, el volumen de carga que arriba al principal puerto de contenedores del país disminuyó ostensiblemente”, explicó García.

El gobierno venezolano inició una serie de acciones para evitar que los comerciantes especulen con los precios y los obligó a bajar los precios de los alimentos, así como artículos para el hogar, ropa, juguetes y hasta servicios funerarios.

El naviero dijo que los barcos que traían 400 contenedores ahora llegan con 100, con una baja del 75 por ciento en las últimas semanas, reducción de la carga que ha movido preocupación a los trabajadores del puerto, operadores y “caleteros” (estibadores).

García explicó que “una razón es que en esta época del año baja la mercancía, pero la otra es que muchas empresas, ante esta situación (fiscalizaciones), tomaron previsiones y decidieron no traer más pedidos hasta tanto el panorama económico se defina”.

En cuanto a la reposición de inventarios, enfatizó que, debido a las trabas en la adquisición de divisas, cuyos tiempos de espera oscilan entre 60 y 90 días, será a partir de febrero próximo cuando podrán medir si llegará mercancía para reponer los inventarios.

Advirtió que, aún con la merma en la llegada de buques, el puerto continúa congestionado porque también carece de muelles suficientes, silos, almacenes, transporte terrestre y sin una coordinación en la compra internacional de mercancías. Reuters