En la NBA cada jugador tiene un papel diferente. Unos están para ser la estrella del equipo, otros para sumar y otros simplemente están. Eso, a nivel deportivo. A nivel de fama, la mayoría de los grandes jugadores se han ganado un nombre partido tras partido, otros sin embargo hacen mucho ruido y aportan poco.
Entre los primeros está el caso de LeBron, Kobe y Durant. Podríamos seguir mucho tiempo, pero vamos a hablar de un caso especial: el de James Harden. “The Beard” tenía una vida perfecta en Oklahoma: buen salario, muchos minutos y un equipo ganador. Pero había algo que no le hacía dar el 100%, no ser un jugador importante, decisivo.
Por ello, se fue marchó a Houston donde en poco tiempo se convirtió en uno de los jugadores más importantes de la franquicia. Una vez superados los problemas de tobillo de finales del año pasado, Harden está dando el 100% esta temporada.
Esto ha hecho que haya batido un marca histórica de Houston que llevaba vigente desde 1995 y con una leyenda del equipo, Hakeem Olajuwon. Harden se convirtió el primer cohete en anotar al menos 37 puntos en tres partidos de forma consecutiva.
Los registros no suponen presión para Harden, el prefiere ver al equipo arriba en la clasificación.
“Lo más importantes es que estamos ganando pero aún nos falta mucho para alcanzar el nivel esperado. Me da igual meter 5, 10 o 37 puntos, lo que quiero es ganar”, destacó Harden.
