El director de “Azul y no tan rosa”, Miguel Ferrari, recibió este domingo el premio a mejor película Iberoamericana en la ceremonia de los Goya.
“Este es el primer Goya para Venezuela. Allí se está viviendo como la final de un Mundial de Fútbol”, inició el discurso un emocinado Ferrari.
En el discurso de agradecimiento aprovechó para recordar a la Villa del Cine, al Centro Nacional Autonomo de Cinematografia (Cenac), al productor, Rodolfo Cova.
Sobre su elenco, el realizador mostró su afecto. “Gracias a los valientes que se atrevieron a interpretar esta película y a poner voz y corazón a unas personas que no se interpretan por prejuicios”, añadió.
“Gracias a Venezuela y a ese país que esperó con tantas ansias una película como esta”, exclamó el cineasta.
“Gracias a mi familia, a mi madre, a mi padre, que no está aquí y esta película está dedicada a él”, agregó.
“¡Viva Venezuela!”, concluyó Ferrari conmovido.
Globovisión