Renuncie por @MariaCorinaYa

Renuncie por @MariaCorinaYa

thumbnailmariacorinamachadoSalgo del Congreso de Brasil, emocionada por haber ejercido el deber y tenido el honor de hablar, como Diputada, en nombre de todos los venezolanos. Concluía un homenaje a parlamentarios que hace 50 años la dictadura había expulsado del Congreso, acusados de “traición a la Patria por haber criticado a su país en el exterior”. Esta “coincidencia” pudo influir en el entusiasmo con  que los diputados, de pie, gritaban: “Venezuela”, “Democracia”, “Valientes” y “Libertad”, cuando me retiraba de la plenaria de la Cámara.

La operación del régimen para impedir que el mundo conozca sus crueles violaciones de los DDHH y sus desmanes contra la soberanía popular, el estado de derecho y la libertad de expresión, ha sido tan costosa como inútil. En Parlamentos, periódicos y hogares de todos los continentes, llaman al régimen venezolano como lo que es: una dictadura.

Hasta hace dos meses, el régimen hizo creer que nos habíamos resignado. Venezuela despertó de punta a punta. Las órdenes cubanas de reprimir toda “candelita”, usando la furia criminal de bandas paramilitares, la PNB y la GNB, tuvieron el efecto contrario: mayor indignación y energía para el movimiento cívico más amplio y profundo de nuestra historia. El régimen cruzo una línea roja y a partir de allí, para los actores extranjeros, la indiferencia es complicidad.





Un pueblo está en la calle decidido a avanzar, irreversiblemente y sin demora, en la transición hasta la democracia. Un país que exige un cambio, no sólo de políticas o de gobernantes, sino en los valores, en el modelo de sociedad; y que está decidido a hacerlo realidad por las vías democráticas que contempla nuestra Constitución.

Resueltos a avanzar por esta ruta, no admitiremos un nuevo engaño con un llamado a dialogo que pretenda desmovilizar la protesta, ganar tiempo o aparentar legitimidad. En cuanto a los Poderes Públicos, rechazamos la oferta de cuotas para maquillarlos. Se impone la recomposición total del CNE, la Fiscalía General, la Defensoría del Pueblo y la Contraloría; sólo para empezar.

Hace dos años, en carta pública dirigida a Fidel Castro, le dije: “Comandante Castro, deje de intervenir en los asuntos internos de Venezuela. Hágalo de buen grado o las fuerzas democráticas de Venezuela se lo haremos entender como hace 50 años.”

Los Castro ya entendieron que los venezolanos lucharemos hasta vencer, hasta conquistar la democracia, la Soberanía Nacional, la dignidad y la libertad. Como Diputada y como ciudadana, le digo, Sr Maduro: ha llegado la hora de que Ud. también lo entienda: Renuncie.

Por María Corina Machado.