Canadá suspende parte de su programa de trabajadores temporales extranjeros

Canadá suspende parte de su programa de trabajadores temporales extranjeros

El Gobierno canadiense anunció la suspensión de un programa que permite importar temporalmente trabajadores extranjeros a Canadá para trabajar en el sector de la restauración de comida rápida, ante la multiplicación de denuncias de irregularidades.

La suspensión se produjo después de que la televisión pública canadiense CBC revelase casos en que restaurantes de McDonald’s y otras cadenas de comida rápida despiden a trabajadores canadienses para contratar trabajadores temporales extranjeros con salarios más bajos.

Comida rápida





Tras meses de denuncias, el ministro de Empleo de Canadá, Jason Kenney, anunció “la inmediata moratoria del acceso del sector del servicio alimentario al Programa de Trabajadores Temporales Extranjeros”.

El anuncio de Kenney se produjo también pocas horas después de que CBC revelase la conversación que mantuvo el martes el consejero delegado de McDonald’s en Canadá, John Betts, con representantes de las franquicias de la compañía.

En la conversación, cuya grabación obtuvo CBC, Betts califica de “sandeces” las denuncias de irregularidades y afirma que, tras reunirse con el ministro de Empleo, Kenney entiende las necesidades del sector.

“Esto ha sido un ataque a nuestra marca. Ha sido un ataque a

nuestro sistema. Es un ataque a nuestra gente. Son sandeces”, afirmó Betts.

La conferencia telefónica entre los directivos de McDonald’s y los representantes de franquicias se produjo el martes poco después de que la compañía anunciase suspender temporalmente el uso del programa de trabajadores temporales extranjeros mientras se realizaba una auditoría.

El programa de trabajadores temporales extranjeros fue instaurado

por el Gobierno canadiense para responder a la supuesta falta de trabajadores canadienses en áreas del país de rápido crecimiento,

como en Alberta, donde el rápido desarrollo de reservas petrolíferas ha provocado una explosión económica.

En 2002, el país aceptaba 100.000 trabajadores temporales

extranjeros, la mayoría para trabajar en el sector agrícola o en lugares remotos. Pero en 2012 la cifra se había triplicado a más de 330.000 trabajadores al año, muchos de ellos para ser empleados por cadenas de comida rápida como McDonald’s o Tim Hortons.

En los últimos años se han multiplicado denuncias de grandes compañías que despiden a sus empleados canadienses para contratar a trabajadores temporales extranjeros en una flagrante violación de las normas del programa.

Sindicatos y organizaciones civiles han denunciado que el verdadero objetivo del programa es proporcionar mano de obra barata y no paliar la escasez de mano de obra.

Un informe dado a conocer hoy por una prestigiosa organización independiente, el Instituto C.D. Howe, señala que el programa no sólo ha servido para bajar de forma artificial los salarios a los trabajadores canadienses sino que en algunas áreas y sectores ha contribuido al aumento del desempleo. EFE