Cerveza y fútbol, un cóctel de pasiones para el Mundial-2014

Cerveza y fútbol, un cóctel de pasiones para el Mundial-2014

(foto AFP)
(foto AFP)

Es mediodía y hay más de 30ºC. El sol raja las piedras de las célebres calzadas de Copacabana. Pero tal es la veneración a la refrescante bebida en el país del fútbol que si pide una cerveza, llegará siempre “estúpidamente helada”, como gustan decir los brasileños.

El fútbol (77%) y la cerveza (35%) son las dos mayores pasiones de los brasileños, según un sondeo encargado por Ambev, la mayor empresa de Brasil en valor de mercado. Los brasileños consumen hasta helado de cerveza.

Y a pocos días del Mundial-2014, que se disputa en 12 ciudades de Brasil desde el 12 de junio, un plan vuelve a unirlas para impulsar una causa común.





Las cerveceras se frotan las manos ante la llegada de la Copa, cuando se espera que se dispare el consumo tanto de brasileños como de la gran mayoría de los 600.000 turistas extranjeros que asistirán a los partidos.

La decisión del gobierno de Dilma Rousseff de aumentar los impuestos a la espumosa bebida -anunciada a 70 días del inicio del Mundial- cayó como cerveza aguada para muchos. Pero este mes, el gobierno dio marcha atrás y decidió que los aumentos de precio de cervezas y gaseosas sólo serán válidos después de la Copa.

– Mucha pasión, pocos socios –

De cada cuatro cervezas consumidas en Brasil, el tercer productor mundial de la bebida, una está asociada al fútbol, según un estudio de la Fundación Getulio Vargas, una prestigiosa universidad privada.

Sin embargo, la venta de alcohol en estadios fue prohibida en el país hace varios años para intentar reducir la violencia, y la FIFA debió luchar duro para conseguir una polémica excepción a la regla durante la Copa, para cumplir así con el multimillonario contrato de patrocinio con Budweiser (propiedad de Ab InBev, nacida de la fusión de la Ambev y la belga Interbrew). Solo la Bud y su prima brasileña Brahma serán vendidas en los estadios mundialistas.

La cervecera Ambev, con el 70% de participación del mercado nacional, quiere aprovechar la Copa del Mundo para desarrollar el endeudado fútbol brasileño mediante patrocinios a decenas de clubes y un plan para aumentar la cantidad de hinchas socios.

Brasil, “el país del fútbol”, es el único pentacampeón del mundo. Pero la mayoría de sus clubes siguen siendo gestionados como en el siglo XIX, tienen enormes deudas y poquísimos socios.

“Brasil está entre las mayores economías del mundo, su ‘seleçao’ está entre las grandes, pero su liga no, no tiene un fútbol local fuerte como tiene España o Italia”, explica a la AFP Marcel Marcondes, gerente de marketing corporativo de Ambev.

Ambev sostiene que quiere ayudar a los clubes a tener más socios, para que tengan así más ingresos y puedan hacer más inversiones y comprar los mejores jugadores.

Para la cervecera, el objetivo no es vender más, precisa el ejecutivo, sino “pelear por la preferencia de nuestra marca”.

La cervecera se ha unido a varias otras empresas para auspiciar un plan que busca convencer a los hinchas de asociarse al club de sus pasiones, para recibir a cambio descuentos en más de mil productos y servicios.

En poco más de un año, la empresa ha conseguido unos 722.000 socios para 49 clubes brasileños, que les han aportado 45 millones de dólares. La meta es alcanzar tres millones de hinchas-socios para 2020, que reportarían a los clubes ingresos extra por 542 millones de dólares anuales.

– El poder del hincha –

“El fútbol brasileño está comenzando a descubrir el poder del hincha para atraer a las empresas. El mejor activo de los clubes es el hincha, que es el fiel consumidor del club”, señala Erich Beting, experto en marketing de fútbol y director del portal Máquina do Esporte.

Para Beting, es imprescindible que las empresas apoyen al fútbol brasileño.

“El fútbol local precisa de las empresas. Si no vamos a perder cada vez más terreno frente al Real Madrid, al Barcelona, al Paris Saint-Germain. Pese a toda nuestra historia y cultura futbolística, nos convertiremos en un país sin industria futbolística”, advirtió.

Hoy, la mayoría de los clubes de Brasil sólo pueden pagar a jugadores muy jóvenes o en fin de carrera.

“Cuanto más fuerte sea el fútbol brasileño, cuantos más momentos hayan para reunirse entre amigos en torno al fútbol, más cervezas serán consumidas. Esta relación entre la cerveza y el fútbol representa una serie de oportunidades para el deporte”, dice a la AFP Pedro Trengrouse, consultor de la ONU para la Copa del Mundo. AFP