Carlos Behrends Valero: A diez años de tu partida

thumbnailCarlosBehrendsHoy 18 de junio de 2014 cumple diez años de fallecido mi abuelo materno, Luciano Valero. En un artículo anterior, publicado el 18 de junio de 2012 por el Diario La Prensa de Barinas escribí una especie de recuento acerca de su trayectoria ciudadana y sus logros estudiantiles hasta la obtención de su título de Doctor en Derecho en la Universidad de los Andes. También me referí en esa oportunidad a algo que siempre tuvo presente, la consolidación de una bonita familia junto a su esposa Fanny Bravo de Valero.

Hoy en su memoria, quiero destacar algunos aspectos relevantes de su vida pública, a la que consagró al menos treinta años en el fragor de la lucha política. Luciano Valero fue para muchos la figura más destacada de la política barinesa durante la era democrática. Su primer cargo público al que salió electo, ya estando al frente de su partido COPEI con apenas veintinueve años de edad, fue el de Diputado Principal al Congreso de la República a finales de 1958. Apenas pudo juramentarse, pues de inmediato debió incorporar a su suplente, ya que fue designado Gobernador del Estado Barinas para el período 1959-1964 por el gobierno de coalición convocado por el padre de la Democracia venezolana Don Rómulo Betancourt. Se dedicó a conformar un gobierno de amplia base que contó con figuras como Adonay Parra Jiménez. Barinas era para la época una ciudad rural con muy pocas calles asfaltadas. Su principal tarea fue urbanizar la ciudad y asfaltar sus calles. Luciano Valero terminó siendo uno de los únicos dos gobernadores copeyanos que Rómulo Betancourt conservó durante los cinco años de su mandato.

Pasó a la oposición durante el gobierno de Leoni, para lograr salir electo nuevamente como Diputado al Congreso de la República; oportunidad en la que su partido logró por primera vez conquistar el poder nacional de la mano de su líder fundador Rafael Caldera. Crucial para esta victoria fue un aporte de votos de la población de Pedraza, que en la sumatoria nacional inclinó la balanza para Caldera por estrecho margen frente a Gonzalo Barrios. Tampoco pudo Valero asumir como parlamentario, pues habiéndose consolidado como líder indiscutible de COPEI Barinas, fue designado nuevamente gobernador de su estado natal por cinco años más. Se convirtió en el gobernador más longevo de la democracia en Barinas, sumó diez años  y tuvo la hermosa oportunidad de consolidar su obra, aún recordada por barineses de su tiempo. Se le atribuyó el mérito de modernizar a la ciudad, sacándola de lo rural a lo urbano. Su carrera política siempre fue en ascenso. También salió electo como senador de la República en 1979, oportunidad en la que ascendió al poder su compadre Luis Herrera Campins, y ya asumiendo responsabilidades de carácter nacional gobernó durante el periodo 1979-1984 en varias tareas, hasta llegar a asumir por dos años la segunda responsabilidad política más importante del país en el momento: El Ministerio de Relaciones Interiores.





La política nunca le fue ajena y siempre le inquietó. Falleció rodeado de afecto y con la satisfacción del deber cumplido. Fue y sigue siendo recordado incluso por sus adversarios como un hombre honesto y serio, celoso de la cosa pública y que detentó el poder para servir y no para servirse.

Me parece oportuno dejar este testimonio, en este oscuro momento de nuestra historia en el que el mal gobierna y pretende arrinconarnos hacia el pensamiento único, privándonos de nuestro derecho a construir nuestro propio criterio.