Una multitud eufórica recibe a los campeones del mundo en Berlín (Fotos)

Una multitud eufórica recibe a los campeones del mundo en Berlín (Fotos)

Germany's Schweinsteiger holds the World Cup trophy during celebrations to mark team's 2014 Brazil World Cup victory at a 'fan mile' public viewing zone in Berlin

Cientos de miles de alemanes recibieron el martes a su triunfante selección de fútbol en Berlín, ondeando banderas y vistiendo los colores nacionales en medio de los festejos por la obtención de su cuarta Copa del Mundo, reseña Reuters.

Fotos Reuters





Tras aterrizar en el aeropuerto Tegel de la capital germana, el capitán Philipp Lahm fue el primero en bajar del avión sosteniendo sobre la cabeza el trofeo dorado conseguido el domingo en la final del Mundial de Brasil. El mediocampista Bastian Schweinsteiger, envuelto en una bandera de Alemania, estaba justo detrás Lahm.

Cerca de medio millón de personas esperaban en la denominada “milla de los aficionados” de Berlín, un tramo de 1,3 kilómetros de la calle que va del oeste de la capital a la emblemática Puerta de Brandenburgo, para una fiesta multitudinaria.

Muchos más ocuparon las aceras de las calles del centro por donde pasó el autobús del equipo.

Aficionados vestidos con camisetas de Alemania, muchos con la cara pintada de negro, rojo y dorado, y algunos con pelucas y pañuelos con los colores nacionales, habían empezado a beber cerveza horas antes de que el equipo tocara tierra.

“Es un ambiente increíble, no hay nada mejor que esto”, dijo Lukas Klein, de 19 años, que condujo toda la noche desde la ciudad de Bremen, al norte del país.

Un rugido se elevó sobre la multitud cuando el avión del equipo sobrevoló la zona, y los seguidores realizaron una cuenta regresiva desde 10 cuando la aeronave tocó la pista. “¡El fútbol vuelve a casa!”, bramaron.

“Estoy muy emocionado por dar la bienvenida a los campeones del mundo una vez en mi vida. Soy de Alemania del Este y esto es importante”, dijo Günther Richter, de 51 años.

La victoria del domingo por 1-0 sobre Argentina en Río de Janeiro fue la primera vez que la Alemania unificada se proclamaba campeona del mundo, ya que Alemania Occidental había ganado la copa en 1954, 1974 y 1990.

Las cadenas de televisión llenaron su programación con la cobertura y los periódicos dedicaron ediciones enteras a la victoria.

“¡Esto es lo que se siente con cuatro!”, tituló el diario más vendido del país, el Bild, en su portada, con una fotografía del equipo con las manos levantadas. Debajo describió lo que consideró los cuatro atributos del equipo: autoconfianza, unión, fiereza y modernidad.

Alemania se llevó la victoria en el minuto 112 de la prórroga con un impresionante gol del suplente Mario Götze, el niño prodigio del país a sus 22 años.

La multitud coreó el nombre de Götze junto con el de Schweinsteiger, que recibió un golpe durante la final y terminó con un corte bajo el ojo izquierdo.

“¡Bienvenidos, campeones del mundo!”, dijo el Berliner Zeitung en su primera página.

Incluso el normalmente sobrio diario económico Handelsblatt llevó a su portada una imagen del seleccionador Joachim Löw, conocido cariñosamente como Jogi, bajo el titular “Alemania Modelo”.

El éxito de la selección nacional desde 2006, cuando Alemania organizó el Mundial, es visto ampliamente como algo que ha ayudado a los alemanes a sentirse más orgullosos de su nacionalidad, que la historia había convertido antes en un aspecto incómodo de reconocer.

El seleccionador de Alemania, Joachim Löw, que ganó el título de la Copa del Mundo en Brasil-2014, compartió el trofeo con los hinchas germanos que se juntaron en Berlín para recibir al equipo al declarar “todos somos campeones del mundo”.

Todos somos campeones

“Debo agradecer a todos los hinchas en Alemania. Sin ustedes no estaríamos acá. Todos somos campeones del mundo”, afirmó Löw desde el escenario montado delante de la Puerta de Brandeburgo, frente a más de 250.000 personas que deliraron con la llegada de sus estrellas que le dieron al país su cuarta corona mundial.

Vestidos con pantalones deportivos y camisetas negra con un gran número uno delante, los jugadores de la “Nationalmannschaft” se presentaron luego sobre un escenario de unos 30 metros de largo instalado delante de la Puerta de Brandeburgo.

Bastian Schweinsteiger apareció envuelto en una bandera alemana, dijo unas palabras y luego fueron pasando sus otros compañeros, hasta que por fin salió a escena el capitán de la Mannschaft, Philipp Lahm, quien levantó el trofeo delante de una multitud que vibró como nunca en los últimos 24 años, desde aquel último título mundial en Italia-1990.

“Desde que era un niño que sueño con esto”, declaró Lahm, agradeciendo al público por su enorme apoyo.

Los jugadores también rindieron homenaje a Miroslav Klose, quien a sus 36 años se convirtió en el máximo artillero de la historia de los Mundiales (16 goles). “Miro Klose, Miro Klose”, cantaron frente a un público que les festejó todo tipo de bromas que hicieron los futbolistas en el escenario.

“Esto es genial, es un momento increíble”, dijo el atacante Lukas Podolski. “Estamos muy orgullosos de lo que hemos hecho. Por fin hemos ganado (la Copa del Mundo). Estamos orgullosos de los hinchas”, señaló por su parte el defensor Peer Metersacker.

Uno de los más esperados fue Mario Gotze, autor del tanto que dio el título a la Mannschaft el domingo en Rio ante Argentina (1-0 en alargue). “Es un sueño”, dijo el jugador de 22 años del Bayern Múnich.

“Buenos días Berlín, estoy orgulloso de ser berlinés”, exclamó el defensa Jérôme Boateng, quien creció en la capital y eligió jugar por la Mannschaft, mientras su hermano Kevin-Prince optó por Ghana, país de su padre.