Se acerca el último trimestre del año y las familias comienzan a organizarse para la compra de pinturas y otros arreglos, próximos a la época decembrina; toman sus previsiones y ajustan su presupuesto para esta práctica que se ha convertido en tradición navideña.
Para gran parte de los compradores un nuevo viacrucis que se suma a la lista de recorridos que deben realizar para alguna compra, puesto que en materia de pinturas se registra la desaparición de algunas clases, colores y marcas.
Las pinturas satinadas están desaparecidas de los stocks de ventas de tiendas larenses y sólo se encuentran pinturas tipo B.
Sus dueños y encargados temen que inicie la temporada navideña sin existencia de productos, puesto que en los últimos cuatro meses han recibido los pedidos de manera irregular.
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