Ayer en el Palacio de Justicia de Puerto Ordaz se asustaron cuando vieron llegar a trabajadores de las empresas básicas que en solidaridad con los tres sidoristas presos que iban a audiencia de presentación, se movilizaron hasta el edificio donde se supone se imparte justicia, ¿O me equivoqué, distribuyen injusticia?
Cuando esa cantidad de sidoristas, alcasianos, de Hidrobolívar, de Ferrominera Orinoco, de Carbonorca, de Venalum, se iban acomodando del lado adentro del Palacio, en lo que sería el patio central como en el colegio, inmediatamente hubo una acción administrativa.
El Jefe de los alguaciles o un alto funcionario de la DEM llegó hasta el grupo que no era muy grande, por cierto, y les pidió que desalojaran el área, eso sí de buenas maneras, porque no iban a poder entrar al edificio para asistir a la audiencia de presentación que ya había comenzado.
Los trabajadores miraron al funcionario y le respondieron con educación, sin sobresaltos ni gritos, que estaba bien que ellos se quedarían tranquilos, que simplemente estaban acompañando a sus compañeros de Sidor.
Fue todo muy en buenos términos. Muy educadamente. Nada que ver con la noche de terror que se vivió en el Palacio de Justicia cuando el sindicato de la construcción tomó la sede y secuestró a las autoridades y amenazó al entonces jefe del core 8 General Arrayago de batirse a tiros si a sus compañeros, los pasaban para La Pica en Maturín.
Ese fue el caso donde cuatro integrantes del sindicato de la construcción y una luchadora social de Toro Muerto fueron acusados por extorsión, presuntamente atrapados en flagrancia como dicen los que saben, los detuvieron y los “dejaron pegados” como dicen los malandros.
Al final la luchadora social iba en el carro con los otros cuatro porque le estaban dando la cola y los sindicalistas estaban el viernes en la tarde visitando a los trabajadores en la obra que se levantaba al lado del comando regional número 8 ahora conocido como comando en zona 62. Eso dijeron sus abogados. Todo eso ocurrió entre el 26 y el 29 de abril de este año.
Todavía hay pintas en la ciudad donde acusan a nuestro maravilloso Fiscal Superior de abuso de poder y de fallarle al proceso.
Al final la Audiencia se suspendió. Los fiscales no hicieron acto de presencia, a pesar de que la defensa, como dijo el abogado Trino Odremán, se había percatado de que estaban allí porque los vieron ¿paseando? caminando por los pasillos de ese incómodo y caliente edificio. Además, tenían que “empaparse” bien del caso.
Será para el 9 de diciembre cuando nuevamente se inicie el proceso. Eso, sí a la juez no se le rompe un tacón y debe salir a buscar un zapatero, o si no le pasa algún inconveniente a la familia de la jueza, que de pronto la llamen para avisarle que descubrieron un nido de avispas en el patio de la casa y los niños están expuestos y como ella debe dirigir las operaciones para bajar ese nido de avispas, deba suspenderse nuevamente la audiencia.