Protestas en Hong Kong cierran con casi mil detenidos

Foto EFE
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La Policía de Hong Kong disolvió hoy el último reducto de los tres asentamientos de las protestas pro democracia que durante 79 días acapararon la atención sobre la ciudad asiática y en los cuales cerca de mil personas fueron detenidas.

Con el desmantelamiento del campamento ubicado en el distrito Causeway Bay llevado a cabo hoy, las autoridades “plegaron el último paraguas” de este movimiento, apodado como la “revolución de los paraguas”, que se definió por su carácter pacífico y que llegó a congregar en alguna ocasión a más de cien mil personas.

El despliegue policial tuvo lugar un distrito comercial donde un reducto de apenas 50 personas permanecía en el campamento improvisado en una de sus calles desde finales del mes de septiembre.





En una hora, agentes policiales y personal de limpieza, con el apoyo de media docena de camiones grúa, desmantelaron los más de cien metros de calle ocupados.

Los agentes detuvieron a 17 personas, según pudo constatar Efe, mientras alrededor de un centenar gritaban consignas a favor del sufragio universal sin restricciones para Hong Kong.

El jefe de Policía de Hong Kong, Andy Tsang, desgranó hoy en cifras estos dos meses y medio de protestas sin precedentes en la ciudad.

En total, 955 personas fueron detenidas por diversos motivos relacionados con las protestas, cifra que podría aumentar durante los próximos tres meses al seguir varias investigaciones abiertas contra los instigadores del movimiento, dijo Tsang.

Del total de arrestados, 75 personas se entregaron voluntariamente, entre ellos tres de los líderes del movimiento Occupy Central, precursor e instigador de las protestas.

Unos 130 policías resultaron heridos durante las concentraciones, mientras que 221 manifestantes recibieron tratamiento médico.

La Policía recibió cerca de 2.000 quejas por su actuación y gestión de las protestas, de las que un 7 por ciento fueron presentadas por los manifestantes.

A lo largo de estos meses de manifestaciones, la población de Hong Kong se movilizó en las calles pidiendo mayores libertades democráticas para la excolonia británica, que retornó bajo soberanía china en 1997.

Durante los primeros tres días de las protestas, a finales del mes de septiembre, más de cien mil personas, según los convocantes, se concentraron en el distrito de Admiralty, desde donde se dirigió el movimiento.

En este reducto, unas 2.000 tiendas de campaña estuvieron instaladas durante más de dos meses.

La Policía llegó a movilizar a cerca de 7.000 agentes en un única operación para dar cierre a los campamentos de los activistas.

La de hoy fue la tercera operación policial en menos de un mes para acabar con los campamentos callejeros que aún se mantenían.

El pasado jueves, en un despliegue sin precedentes en la ciudad, miles de policías participaron en el desalojo de los manifestantes del distrito de Admiralty, desde donde se gestó y se llevó a cabo el movimiento a favor de una reforma electoral para Hong Kong que permita a sus ciudadanos elegir a los candidatos a su Gobierno sin interferencias por parte del poder chino.

Tres semanas atrás, cientos de agentes ponían fin al bloqueo de carreteras en el distrito de Mong Kok, uno de los campamentos más activos y beligerantes del movimiento.

Las protestas a favor de mayores libertades democráticas en Hong Kong han supuesto el mayor desafío al Gobierno de China en los últimos 25 años, tras la sangrienta represalia de los manifestantes en la plaza pequinesa de Tiananmen.

Si bien las sentadas permanentes han desaparecido prácticamente con la operación de hoy, son cientos las personas que cada noche siguen saliendo a las calles a pedir mayor apertura democrática para la ciudad.

En este sentido, Tsang dijo que dispositivos especiales de la Policía se encargarán de que la ocupación de calles no se vuelva a repetir en el futuro. EFE