Oswaldo Páez-Pumar: Gato encerrado

Oswaldo Páez-Pumar: Gato encerrado

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El usurpador denunció ‘gato encerrado’ al referirse a una sentencia del tsj cuyo contenido no es necesario explicar porque según el usurpador ‘es antirrevolucionaria y atenta contra el legado de Chávez’. Algo similar hizo el eterno difunto cuando estaba vivo, calificó de “plasta” otra sentencia del tsj.

¿Cuál es la diferencia? El difunto eterno no dijo nada más. Supo que los magistrados recogerían su plasta. En los hechos no solo la recogieron sino que en el acto de inicio del año judicial gritaron “uh, ah, Chávez no se va”. Luego Luisa, dejaría su estela, con algo así como: ‘no queremos separación de poderes, sino coordinación para lograr los fines del estado’. Discretamente se abstuvo de mencionar quien sería el coordinador. Intuyo que el difunto eterno porque la condena a 30 años de la juez Afiuni la pronunció él.





El usurpador en cambio anunció además que hablaría con Gladys Gutiérrez, el relevo de la estela, para que revocaran la sentencia. Lo que antes hizo la sala constitucional con cierto disimulo (no por cierto discreción, porque a ésta es ajena la revolución que necesita, como el pez el agua, mostrar su poder y su suficiencia), hoy se ordena por televisión. Una modificación de la sentencia dejará su nueva estela. Allí quedarán expuestos los magistrados que deban asumir la tarea de dictar una “sentencia revolucionaria que preserve el legado de Chávez”.

Lo curioso es que será a la sala constitucional a la que le corresponderá el mérito de preservar la sujeción del poder judicial al poder ejecutivo, así esté en manos de un usurpador; aunque a decir verdad esa sujeción que atenta contra el principio constitucional de la separación de poderes es tanto más notable cuanto más atropelle el poder ejecutivo el texto constitucional. Es como si la sala constitucional hubiese sido creada como un escudo para amparar las violaciones a la constitución con una sentencia inapelable.

Sin duda que las palabras del usurpador anunciando su futura conversa con Gladys que provocará la nueva sentencia constituyen, como es de rigor llamarlo en el medio de los abogados, confesión de parte. Aquí no hay separación de poderes. El usurpador los dejó en evidencia. Quizá por eso usó la expresión “gato encerrado”, que deja también en evidencia su mal manejo del lenguaje, ya que lo que los felinos lo que acostumbran es tapar “su plasta”; y esa denuncia deja expuesta la plasta del tsj y su sala constitucional antes de haber sido puesta.