Luis Izquiel: 2014, récord de violencia criminal

thumbnailluisizquielEl año que culmina se convirtió en el más violento de la historia de Venezuela. El reciente informe del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) reflejó que en 2014 se cometieron 24.980 homicidios en el territorio nacional, una cifra récord que nos ratifica como el segundo país con mayor tasa de asesinatos en el mundo entero (82/100.000 habitantes). Solo en Caracas hubo 5.036 muertes violentas, para un promedio de 14 por día.

El 2014, desde su comienzo, estuvo marcado por el asesinato de personas con relevancia pública. Los homicidios de Mónica Spears, Eliecer Otaiza, Enrique Franceschi (alcalde de Río Caribe) y Robert Serra, entre otros, alarmaron al país. Este tipo de casos le puso rostro a las frías cifras delictivas.

Otro dato relevante en 2014 fue el número de policías asesinados. Solo entre Caracas (132), Carabobo (62) y Aragua (42) fallecieron más de 230 funcionarios de seguridad a manos del hampa. El OVV señaló que esta realidad lleva a “una desmoralización cada día mayor en los cuerpos policiales, quienes además de ser victimizados (por la delincuencia), se sienten sin autoridad y sin apoyo”.





El OVV también observó un incremento del robo y el hurto. En cuanto a estos delitos hay que resaltar la audacia de los criminales al momento de ejecutarlos. Por ejemplo, en los últimos días del año grupos organizados de antisociales cometieron atracos colectivos a bañistas en las playas de Arapito (Sucre) y Villa Marina (Falcón). En 2014 hasta en las iglesias se atrevió a incursionar el hampa.

El pasado año se fortalecieron las llamadas “megabandas” criminales, siendo la del “Picure” (la cual actúa en el estado Guarico y en el sur de Aragua) la que mostró mayor actividad delictiva. Asimismo, los colectivos paramilitares demostraron el poder que hoy poseen. Al respecto, el OVV señaló en su informe que “las amenazas a los funcionarios y la destitución de las autoridades que intentaron aplicarles la Ley (a los colectivos), enviaron un mensaje profundamente negativo al país”.

El secuestro y la extorsión también reinaron en 2014. La particularidad es que las víctimas de estos delitos son ahora principalmente personas pertenecientes a los  estratos medios y bajos de la población. Por otra parte, sobre la delincuencia organizada, el OVV afirmó que “Venezuela continua siendo una plataforma privilegiada para el transporte de droga hacia Europa y EEUU, así como para el lavado de dinero”.

Esta ola criminal ha tenido consecuencias negativas en el comportamiento de la población. Sobre este punto, el OVV destacó que “hay un incremento en el miedo de las personas. Estas dejan de realizar actividades, regresan a sus casas, se encierran mas temprano y confían hoy más en la protección de sus vecinos que en la policía”.

El sistema penitenciario continuó siendo un desastre en el 2014. El episodio en el que murieron 50 presos en la cárcel de Uribana, vino a coronar un nuevo año con cientos de reclusos fallecidos de forma violenta en las prisiones del país. El retardo procesal y el hacinamiento, siguieron marcando la pauta. Las fugas masivas de presos en las comisarías policiales, constituyeron otro aspecto preocupante.

Ni el “Patria Segura”, ni el “Patrullaje Inteligente”, ni el plan de “Entrega Voluntaria de Armas”, entre otras iniciativas del Ejecutivo Nacional, lograron revertir el incremento de la criminalidad en 2014. Hoy menos del 10% de la población confía la capacidad del Gobierno para enfrentar eficientemente el delito (OVV).

Sí el gobierno de Nicolás Maduro continúa aplicando políticas improvisadas e irresponsables de seguridad ciudadana (nada hace presumir lo contrario), lamentablemente el panorama de este 2015 también será oscuro en materia de criminalidad.

Twitter: @luisizquiel