Exiliados en Miami consideran “absurdo” el canje que propuso Maduro

Leopoldo López1 archivo

Opositores venezolanos residentes en Miami, Estados Unidos, calificaron de “torpe, absurda e incoherente” la propuesta del presidente Nicolás Maduro de canjear a un opositor preso en Venezuela por un puertorriqueño encarcelado en suelo estadounidense. EFE

“Es absurdo cambiar a Leopoldo López, un ser humano productivo, un líder comunitario… por un terrorista”, dijo a Efe la presidenta del grupo USA Refugees & Immigrants, Carmen Giménez.





Según la activista, “no hay nada que ate territorialmente” al preso líder independentista boricua Óscar López Rivera con Venezuela, “es incoherente, no tiene nada que ver con algo patriótico”.

El grupo Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) también mostró su asombro por la sugerencia de Maduro de liberar a López, encarcelado desde febrero de 2013 en Venezuela.

“La torpe y absurda declaración de Maduro deja muy claro que Leopoldo López es un preso político de su régimen, y que la razón de su detención ilegal obedece estrictamente a órdenes impartidas por él mismo a un sistema judicial corrupto que no es imparcial”, cuestionó en un comunicado José Colina, presidente de Veppex.

Colina señaló que espera que la “inconsistente petición de Nicolás Maduro a Estados Unidos” convenza al Gobierno de Barack Obama de que se trata de “un régimen que viola los derechos humanos”.

Maduro dijo el domingo en Brasil que “la única forma” de favorecer con un indulto presidencial a López sería mediante un canje con López Rivera, preso en Estados Unidos desde hace 33 años y quien es considerado terrorista por unos y prisionero político por otros.

El mandatario venezolano tuvo el jueves pasado un breve encuentro verbal en Brasilia con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien lo instó a liberar al opositor.

López está preso en la cárcel militar Ramo Verde, próxima a Caracas, desde el 18 de febrero de 2014, seis días después de unos hechos de violencia que dejaron tres muertos y provocaron una oleada de protestas antigubernamentales que en los cuatro meses posteriores dejaron 43 muertos.