Senador Marco Rubio quiere cancelar conversaciones con Cuba hasta liberar a presos políticos

Foto: Senador Marco Rubio / Reuters
Foto: Senador Marco Rubio / Reuters

 

El senador Marco Rubio, un opositor al restablecimiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, pidió el martes al Gobierno del presidente Barack Obama que cancele las conversaciones para un restablecimiento de relaciones entre los países al menos hasta que La Habana libere a decenas de detenidos, reseña Reuters.

Funcionarios estadounidenses han dicho que Cuba acordó la liberación de 53 personas que Washington considera presos políticos, como parte de un intercambio de prisioneros y un compromiso para restablecer relaciones que estaban rotas desde hacía mucho tiempo.





La Casa Blanca se ha negado repetidamente a informar de los nombres de los 53, y la portavoz del Departamento de Estado dijo el lunes que no podía confirmar públicamente si siquiera alguno de los prisioneros había sido liberado.

El destino de los detenidos ha entregado argumentos a los críticos del cambio de política de Obama. Rubio y otros han dicho que buscarán frenar o bloquear las iniciativas para una mejora de las relaciones con La Habana.

Se espera que los legisladores participen en audiencias sobre la nueva política hacia Cuba en las primeras semanas luego de que un nuevo Congreso asuma el martes.

Rubio dijo que Roberta Jacobson, la asesora del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental, debería cancelar un viaje a La Habana previsto para este mes en el que se discutirá la normalización de relaciones, al menos hasta que se liberen a los 53.

“A casi tres semanas de su anuncio sobre Cuba, no hay ninguna razón para que alguno de estos individuos esté en prisión o sea blanco de la represión, o para que sus identidades, condición o ubicación sigan siendo mantenidas en secreto”, dijo Rubio en una carta a Obama con fecha 6 de enero.

Varios legisladores, principalmente republicanos encabezados por Rubio y otros cubano americanos, han expresado preocupación por la decisión de Obama de acabar con medio siglo de aislamiento de Cuba.

Su argumento es que el cambio de política de Obama ofrece legitimidad y dinero al Gobierno comunista de la isla mientras sigue violando los derechos de las personas.