El Acura NSX, que en el resto del mundo será Honda regresa y comenzará a circular por las carreteras de todo el mundo a finales del año.
Luego de 10 años de ausencia y respecto a su versión de 2005, el Acura NSX es muy diferente aunque sí que mantiene una premisa. Es un carro “global”, al gusto de todos los públicos, japoneses, europeos o americanos, como lo era el primer NSX.
De aquel V6 atmosférico de 270 caballos de fuerza y tracción trasera poco queda. Ahora es un híbrido con más de 500 caballos, obtenidos de la suma de la fuerza que entregan cuatro propulsores: un bloque térmico de seis cilindros situado en posición central y tres motores eléctricos que componen el conjunto llamado Sport Hybrid SH-AWD (Super Handling All-Wheel Drive).
Con esta configuración, el V6 biturbo y uno de los motores eléctricos integrado con el bloque y la caja de cambios de doble embrague DCT de nueve velocidades operan sobre las ruedas traseras, mientras que las otras dos unidades eléctricas impulsan las ruedas delanteras para conseguir tracción integral y un sofisticado control vectorial del par.
La maniobrabilidad mejora gracias a su sistema de tracción Sport Hybrid SH-AWD, que busca responder de manera más eficiente a los movimientos del conductor. También incluye el sistema de asistencia a la dirección Agile Handling Assist (AHA).
El NSX incluirá cuatro modos de conducción: Quiet, Sport, Sport+ y Track. Según sea la elección, el sistema se ajusta a la respuesta de propulsión, motores, cambio y chasis, así como al nivel de sonido del motor. La modalidad Quiet permite conducir con propulsión únicamente eléctrica en marchas bajas y por espacios breves de tiempo. La respuesta dinámica del vehículo se eleva a medida que el conductor pasa de la modalidad Sport (Deportivo) a Sport+ (Deportivo+) y, por último, a Track (Pista), en la que el NSX ofrece todo su rendimiento.
Fuente: Expansión
