Lester Toledo: Leopoldo López, un sentimiento nacional

Lester Toledo: Leopoldo López, un sentimiento nacional

thumbnaillestertoledoabr2014Leopoldo López cumplió ayer un año de injusta prisión, 365 días de vejaciones, aislamiento, castigo, insultos, injusticia y maltrato. Todo el aparataje del régimen en contra de una sola persona, señalándolo fraudulentamente, sin argumentos, ni pruebas, de haber incitado las protestas en contra el régimen de Nicolás Maduro cuando lo único que hizo fue llamar a todo un país a reclamar por los miles de problemas que ha traído ésta mal llamada revolución. Aún retumban sus palabras en la mente de millones de venezolanos: “Si mi encarcelamiento vale para el despertar de un pueblo… valdrá la pena mi encarcelamiento infame”. Y vaya que lo despertó. Hoy Venezuela es otra. Una Venezuela valiente. De venezolanos que saben que este régimen tiene sus días contados y que por la vía constitucional muy pronto llegará a su final, pues nuestra Carta Magna prevé varias situaciones para ello.

Quienes deberían estar presos y justamente juzgados son los funcionarios que accionaron sus armas y quienes ordenaron la ejecución de los jóvenes venezolanos. Y hoy lamentablemente vemos que estos gozan de un manto de encubrimiento, mientras que toda la lluvia de acusaciones va hacia Voluntad Popular y especialmente, a su líder.

Lo peor, y es el signo que más ha estigmatizado internacionalmente a este régimen, es el caso omiso que Maduro y sus colaboradores han hecho al clamor internacional, que deja en evidencia que en Venezuela hay una dictadura que viola de manera descarada los derechos de sus ciudadanos.





Desde el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza y hasta los consejos del Papa Francisco, han sido ignorados por el régimen.

También se han negado a aceptar las peticiones de premios Nobel como el ex presidente de Costa Rica Oscar Arias o del presidente norteamericano Obama; el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy; el canciller de Canadá, John Baird; el presidente de la Internacional Socialista, George Papandreou; Irwin Cotler, ex abogado de Nelson Mandela; los ex presidentes: Fernando Henrique Cardoso (Brasil), Felipe González y José María Aznar (España), Sebastián Piñera y Ricardo Lagos (Chile), Alejandro Toledo (Perú), Andrés Pastrana y Alvaro Uribe (Colombia), Luis Alberto La Calle (Uruguay), Felipe Calderón (México), Jorge Quiroga (Bolivia), Osvaldo Hurtado (Ecuador) y Romano Prodi (Italia); Ollanta Humala (Perú); el Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Zeid Ra’ad Al Hussein; y organizaciones mundiales como la ONU, Amnistía Internacional, Human Right Watch, entre otros pronunciamientos, tercamente ignorados.

Pero el régimen sigue ciego y sordo por una razón: Leopoldo López se ha convertido en la esperanza de los venezolanos. Hacia él han demostrado temor, son más de 10 años de persecución. Chávez lo inhabilitó en 2008 para evitar que llegara a la Alcaldía Metropolitana cuando encabezaba todas las encuestas y ahora Maduro lo encarcela porque ve su liderazgo creciente.

Hoy a más de un año del encarcelamiento cobarde de Leopoldo repetimos como lo expresamos ayer en nuestro glorioso acto en la Plaza República: ¡Fuerza y Fe!. Seamos los obreros, para juntos construir un puente de Ramo Verde a Miraflores y alcanzar el cambio.