Pueblos del Sur de Bolívar convertidos en “trincheras” para delincuentes

Pueblos del Sur de Bolívar convertidos en “trincheras” para delincuentes

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La extracción de oro de manera ilícita en diferentes municipios del Sur del estado Bolívar, genera a diario muertes violentas, hechos a los que las autoridades policiales hacen caso omiso. Bladimir Martínez Ladera/ NPG

Grupos armados se adueñaron de las diferentes minas que están en la zona del municipio Sifontes, Roscio, El Callao y Piar. En cada territorio minero actúan los conocidos “pran del oro”, sujetos que obligan a los mineros a venderles lo que obtienen para luego entregarle “los kilos” a un tercero, éste último de la cadena se encarga de negociarlo  a compradores internacionales en dólares.

Ciertamente el oro es material estratégico del Estado, sin embargo los mineros ilegales vienen creando un pequeño desierto en diferentes localidades y áreas protegidas del estado Bolívar, en la búsqueda del material precioso, según “Carlos”, quien sólo se limitó a dar el nombre, “parecen plagas” acotó.





Los grupos comandos, poseen armas largas de alto calibre y actúan de manera impune, igual de forma perversa contra sus víctimas, uno de los casos que se pudiera mencionar es sobre la muerte de “El Niño”, quien fue sacado a las fuerzas de una habitación ubicada en el sector Riveras del Caroní, Puerto Ordaz, para luego ejecutarlo de múltiples disparos.

Red de delincuentes

Cuenta un testigo que eran más de 14 hombres fuertemente armados. Los bandidos portaban armas de guerra, AK 47 y pistolas 9 milímetros. Rafael Linares Malavé de 27 años dormía en ese momento, sin embargo un par de desconocidos con una mandarria intentó echar la puerta al suelo, mientras que la víctima logró escabullirse, solo pudo correr varios metros, enseguida fue alcanzado.

Una vez capturado lo ejecutaron sin piedad, según vecinos escucharon  más de 50 disparos, el número de cartuchos .40 y 9 milímetros confirmaron que el minero murió masacrado a plomo, Rafael, popularmente conocido como “El Niño”, trabajaba en una de las minas de El Callao, meses anteriores había sufrido un atentado, en esa oportunidad salió ileso.

A este crimen se suma el más reciente, Jhonatan Anderson Rivas Medina, 19 años, quien recibió varios tiros, luego de recibir una llamada telefónica. El joven, quien trabajaba en las minas Planta Perú, salió de su casa y lo aguardaba un par de motorizados, los desconocidos sin mediar palabras accionaron sus pistolas, los proyectiles impactaron en el pecho, brazo y cabeza del infortunado, éste enseguida se desplomó al suelo sin signos vitales.

Antes de estos hechos, Jorge Luis Sandoval Gómez de 29 años, fue localizado en un hueco de 10 metros de profundidad en las minas La Pelota de Santa Elena de Uairén, después de ocho días que llevaba desaparecido.

Los padres del infortunado lo buscaron por todos lados, hasta que otro minero hizo el hallazgo. No obstante, se pudo conocer que en estas zonas mineras existen “huecos de la muerte”, sitio que son utilizados por la red de “pranes” para sepultar aquellos que se niegan a entregar lo que producen.

David Piña Navarro, 24 años, murió recientemente en el fondo de su casa ubicada en barrio Maturín de Upata, era minero de El Callao. Dos sujetos lo sorprendieron y después le dispararon hasta dejarlo sin vida.

Kelvin Eduardo Blanco, 22 años, lo asesinaron en la calle Páez, sector La Bomba de Tumeremo, municipio Sifontes, el infortunado trabajaba en la mina La Leona, presentó múltiples heridas por armas de fuego, ocasionadas por hampones en motocicletas.

Oniver Gregorio Ruiz González, expiró posteriormente de recibir varios disparos ocasionados por antisociales en motos, el hecho aconteció en la zona de El Manteco, tres días antes había estado en Guasipati, era minero en el municipio Roscio.

Cadena de muerte

Hussni Nabilsi Rodríguez Cueva, apodado “El Menor”, al parecer motorizados de la GNB, lo interceptó en Guacara, estado Carabobo, el día 31 de diciembre del año pasado. La víctima se movilizaba en una Toyota Autana gris, placas FEB 71G blindada, acompañado de su suegra, su cuñada y tres sobrinos, iban para Yaracuy a recibir el año nuevo junto al resto de la familia.

Detrás de su vehículo lo seguían sujetos en tres carros, momentos en que se bajó, los uniformados lo sometieron y después se lo entregaron a las personas que lo perseguían de cerca

El minero fue torturado para que entregara un supuesto cargamento de oro que trasladaba en su camioneta blindada, a pesar que los familiares denunciaron la desaparición forzosa, la queja no pasó de una simple denuncia, después que es localizado muerto en Tejerías, estado Miranda.

Rodríguez, dominaba campamentos mineros en la zona sur del estado Bolívar. Una vez que se conoció sobre su muerte, el día 2 de enero se presentó “Ismael”, en el cruce La Pastora y emboscó a la gente de “El Menor” para obligarlos a salir de este territorio.

En el intento por adueñarse de la mina, tres pistoleros de “El Menor” fallecieron y uno resultó gravemente herido. “Ismael”, sometió a otros 12 hombres más de Rodríguez Cueva, e intentó ejecutarlos después de rendirse.

Entre los muertos estaba Javier Alexander Burguillos, 25 años y Andrés Miguel Chirinos, 19 años, el tercero no pudo ser identificado, todos presentaron perforaciones múltiples ocasionadas por armas de fuego.