Aunque ustedes no lo crean, sí leemos los comentarios. Y esta es la primera oportunidad en que queremos destacar uno por ejemplificar la realidad económica que se vivía en la satanizada cuarta República.
Las canas saben, las canas se aprecian y agradecemos de esta manera al lector Miguel Sánchez, que explicó los años 60, 70, 80 y comienzos de los 90 a las nuevas generaciones; motivado por la publicación del nuevo Chevrolet Spark.
“Para los niños que no conocen la Historia de la Famosa Cuarta República, (Años 60, 70, 80 y comienzo de los 90) les cuento que con un sueldo de funcionario público o de un trabajador se podía comprar un carro nuevo de agencia.
Muchos esperaban a comprar a partir de septiembre que empezaban la exhibición de los nuevos modelos en los concesionarios, o también podías comprar carros usados en el concesionario con un año de uso, ya que muchos los cambiaban por uno nuevo y entregaban el otro como parte de pago.
Recuerdo que estudiantes en la Universidad compraban carritos cuyo precio no pasaban de 1000 bs, y los mantenían con la beca. Pero esa es la vieja historia aberrante de la “Venezuela capitalista”, donde los que trabajaban en un taller mecánico casi siempre tenían su carro y no andaban a pata. Hoy en día tener un carro es un gran lujo. Y mantenerlo un sacrificio”.