El peso de la tradición para un bebé real

El peso de la tradición para un bebé real

(Foto Reuters)
(Foto Reuters)

Guillermo y Catalina ofrecen una imagen de padres modernos, pero el protocolo en torno al nacimiento de su segundo hijo obedece a reglas basadas en ocasiones en tradiciones ancestrales.

– Hubo un tiempo en que el ministro del Interior debía asistir al nacimiento del bebé real para asegurar su legitimidad. Esta tradición fue abandonada en 1936, tras el nacimiento de la princesa Alexandra, prima de la reina Isabel II. Guillermo, en cambio, prevé estar presente, como ya lo hizo con su primer hijo, y como lo hicieron antes el príncipe Carlos (su padre) o Alberto, el marido de la reina Victoria.

– La reina, el primer círculo de la familia real y los padres de Catalina serán informados a continuación.





– Después, los súbditos de su majestad conocerán la noticia mediante una proclamación firmada por los médicos reales y colgada en el patio de Buckingham. En pro de la modernidad, el palacio publicará al mismo tiempo un comunicado y lo colgará en Twitter y Facebook.

– Para celebrar la buena nueva, se dispararán salvas de cañón (62 desde la torre de Londres y 41 desde Green Park, cerca del palacio de Buckingham). La Union Jack será izada en todos los edificios oficiales.

– El secretario privado de la reina informará a los gobernadores generales de la Commonwealth.

– El nombre del bebé podría no ser desvelado hasta varios días después: los británicos tuvieron que esperar una semana antes de conocer el nombre de Guillermo y un mes para el de Carlos. El de Jorge, primer hijo de Guillermo y Catalina, nacido en julio de 2013, fue hecho público dos días después de su nacimiento.

– Ya se sabe, en cambio, que responderá al tratamiento de “Alteza real”.

– Será bautizado por la Iglesia anglicana, en una réplica del vestido bordado y de satén que llevaba la hija mayor de Victoria en 1841. El original no es utilizado desde 2004 para preservarlo del paso del tiempo.

– Jorge fue bautizado por el arzobispo de Canterbury en la capilla real del palacio de San Jaime, con agua de Jordán – donde Jesús fue bautizado por Juan Bautista, según el evangelio-, vertida sobre la misma pileta de plata esculpida con nenúfares que ha sido utilizada desde hace varias generaciones por la familia real.

– Los bebés reales tienen por lo general unos seis padrinos. Jorge tuvo siete, entre ellos Zara Tindall, la prima de Guillermo. AFP