Oferta limitada de hilos y telas afecta a costureras en Upata

Oferta limitada de hilos y telas afecta a costureras en Upata

costureras

Los talleres de confección de ropa en Piar están en un aprieto. La materia prima con la que trabajan, aseguran algunas costureras, difícilmente se consigue. Las fallas en la distribución de hilos, cierres, botones y telas merman el trabajo de quienes ofrecen una alternativa al alto costo de la ropa. Nueva Prensa Guayana

Según Mirla de Segovia, propietaria de un taller de costura, las distribuidoras donde solía comprar no tienen materiales que ofrecer, dijo que en la última compra desarrollada no consiguió algunos cierres que solicitó, tampoco logró encontrar varios colores de hilos, ni botones y eso le ocasiona mucha preocupación porque algunos clientes se molestan cuando los pedidos no están a tiempo.





Añadió que las telas están muy caras y no hay variedad, menciono que algunos clientes solicitan la confección de blusas, faldas y pantalones, en vista de los altos costos que ofrecen las tiendas en el centro, pero no pueden atenderlos porque no consiguen material para elaborar lo solicitado, además el costo por fabricar cualquier tipo de ropa también se ha incrementado.

Afirmó que la situación del sector es “crítica” porque los proveedores no están despachando a las mercerías, ni textilera como años anteriores, además los encargados de estas tiendas han informado que no saben cuándo comenzarán a surtirlos, ya que no tienen inventario suficiente en los almacenes, para la confeccionista las perspectivas a corto plazo se presentan “negras”.

Costos elevados

Ana Díaz, tiene un taller de costura donde se dedica a realizar algunas modificaciones y reparaciones de ropa, porque debido al alto costo de los materiales de confección prefiere ofrecer este tipo de servicio que elaborar cualquier pieza de vestir, “anteriormente uno visitaba las mercerías en busca de hilos de cualquier color y tamaño y lo encontrabas ahorita no se consigue nada”, afirmó.

Díaz declaró, que existen talleres de costura que sólo confeccionan la ropa si el cliente lleva todos los materiales, porque por ahora estos sitios prestan sus servicios a las personas que lleven prendas para arreglar. “Nosotros pensamos que en cualquier momento podemos cerrar las puertas, producto del alto costo de los materiales para la elaboración y reparación de ropa”.

Anteriormente, los upantenses solían visitar a una costurera o sastre para solicitar sus servicios, pero en vista de la ausencia de la materia prima y los altos costos, ya no es una opción. Además, aseguran que si ellos compran lo que se necesita les sale al mismo costo que puede estar en una tienda del centro y muchos prefieren comprarla en los comercios que gastar el doble de su costo.

En el caso de Yenerys Astudillo, cliente de estos talleres, informó que siempre ha utilizado este tipo de  servicio,  no tanto por lo que se ahorraba sino porque la ropa la hacen según tus medidas. Aseguró que una blusa no baja en el centro de 4 mil bolívares y hacerla a la medida cuesta 1.500. Añadió que ahora con el déficit de material, mandarla a hacer, si la persona compra la tela, hilos y botones, el valor es el doble.

También Amelys Santander, otra propietaria de un taller de costura, añadió “está costando mucho conseguir telas y rellenos para fabricar baberos, toallas con capucha, cobijas, cargadores indígenas, forros para coches y cunas. Relató que ha tomado previsiones y no deja que se le acaben los materiales para volver a comprar. En noviembre hizo una compra importante de telas que le ha permitido mantener los niveles de producción.