Exequíades Chirinos: El sacudón del 6 de diciembre

Exequíades Chirinos: El sacudón del 6 de diciembre

thumbnailexequiadeschirinosAnunciada la fecha de las elecciones parlamentarias, entre gruesos tragos de agua y mucho nerviosismo, Nicolás Maduro y sus segundones de inmediato enfilaron sus baterías contra la Mesa de la Unidad Democrática. Era de esperarse.

A la estrategia de estimular la abstención le sumaron ahora presagios de violencia: un nuevo sacudón más potente al 27 de febrero, en palabras de Maduro, quien con ello sencillamente confiesa, indirectamente, que tienen perdida la batalla electoral y no les queda otra que asustar con “el coco” de la oposición. Je, je, je.

En algo tienen razón Maduro, Diosdado Cabello y su madurismo: todas las encuestas y el pálpito de la calle pronostican un verdadero sacudón electoral de gran magnitud y, evidentemente, los incomoda porque será la peor de todas las derrotas del oficialismo. Ello los descompone porque en vez de hablar de triunfo del Psuv, se trastornan al extremo de formular esos temerarios anuncios de que una nueva Asamblea Nacional dominada por las fuerzas de la oposición será una especie de hecatombe para los venezolanos.





Difícil de creer que alguien pueda superar el récord del gobierno nacional en cuanto a cómo destruir un país en muy pocos meses, tarea en la cual nadie le gana a Maduro, a Cabello, y a esa fracción rojita de la actual AN servil y cómplice. De ahí que pretender achacarle los males del gobierno a la MUD es una tarea titánica, inalcanzable.

Las elecciones parlamentarias serán el día del gran desquite de los venezolanos, sobre todo de la gente de a pie, contra Maduro y sus enchufados, a quienes responsabilizan directamente del gran desastre que vive la nación en cuanto a escasez de alimentos, medicinas, a poseer los más altos niveles de inflación e inseguridad jamás vistos en la historia venezolana. En fin, la hora de la gran revancha que intentaron evitar durante largos meses hasta que a la Tibisay Lucena no le quedó otra que anunciar la tan esperada fecha.

Ese 6 de diciembre se producirá una avalancha de electores en los Centros para castigar al madurismo, al  diosdadismo, y también al propio Chávez, figura clave que contribuyó en gran medida a configurar la catástrofe que vivimos, porque él y sus nefastas políticas de expropiaciones condujeron a producir el gran impacto negativo en el aparato productivo nacional y a la construcción de una economía de importaciones que solo beneficia y enriquece a los miembros del entorno del gobierno nacional.

Los venezolanos saben que la vía institucional es el voto, y el momento apropiado es el día de la elección de los diputados, de allí que resulta difícil aplicar una estrategia de distracción o intentar responsabilizar a otros porque cada segundo en Venezuela miles de familias mencionan el nombre de Maduro, de Cabello en los peores términos mientras hacen esas largas colas buscando un litro de aceite, un kilo de leche o un paquete de harina de maíz.

Si se suman todas esas voces de protesta en las cientos de colas, muy seguramente se tendrá un gran murmullo de desaprobación contra Maduro. Por ello el día del desquite nacional, el 6 de diciembre, ese malestar se traducirá en el voto castigo y no me cabe la menor duda de ello, a pesar de aquellos que piensa que la abstención dominará el escenario.

Así que no se preocupe si diputados como Jesús Farías u otros le echan todas las culpas del mal gobierno a la MUD o presagian que los programas sociales se acabarán con la llegada al Poder Legislativo de verdaderos parlamentarios comprometidos con el destino del país. Evite caer en esa trampa caza-bobos basada en que prácticamente se acerca el día final y Maduro timonea el Arca de Noé. Descarte esas mentiras y otras que inventarán de aquí al 6 de diciembre y súmese a la unidad, a los eventos políticos de la MUD y muy especialmente participe en los preparativos para ayudar a movilizar la gente el día de las votaciones.

Haga campaña y vaya a votar por los candidatos de la MUD. Hágalo con emoción, con cariño, con pleno conocimiento y esperanza de que se elegirán verdaderos diputados ante la Asamblea Nacional para empezar el proceso de cambio y reconstrucción del país. Entienda que en esas planchas desafortunadamente no caben todos los líderes que deberían estar pero que existe un espacio político amplio y el cual trasciende a la AN.

Siéntase orgulloso de votar por la tarjeta unitaria porque más allá de elegir al diputado, usted contribuirá a que nuestros parlamentarios contribuyan a frenar todas esas barbaridades que cometen a diario el gobierno de Nicolás Maduro y sus enchufados, como esa de estarle regalando nuestro petróleo a Cuba, de tener presos políticos en condiciones infrahumanas o andar paseando por el mundo con los dólares que a usted le niegan. Apoye a la MUD y verá como ocurre en Venezuela un verdadero sacudón electoral.

@exequiades