Sebastiana Barráez: Así tratan en el Psuv a las mujeres

Sebastiana Barráez: Así tratan en el Psuv a las mujeres

MaríaGabrielaVareladeMaldonado

 

La periodista de investigación Sebastiana Barráez narra en su columna del semanario Quinto Día los casos de mujeres militantes del PSUV que han sido desplazadas de sus aspiraciones electorales por esposas de jefes políticos locales. Así lo cuenta.





 

TÁCHIRA. Se llama María Gabriela Varela de Maldonado. Es una chica bella y talentosa, oriunda de Michelena. Fue por dos años la secretaria general de la Gobernación del Táchira con Vielma Mora y chavista radical. Se le ocurrió postularse como candidata a las primarias del Psuv, para el circuito Montaña Baja (Andrés Bello, Guásimos, Lobatera, Michelena, Ayacucho, Seboruco y José María Vargas). Ahí cayó en desgracia, porque Vielma Mora aspira a que sea su esposa Karla la impuesta por lista. A pesar de toda la presión contra Varela de Maldonado, el candidato de Vielma le ganó por un mínimo porcentaje. Luego 29 dirigentes de los comandos municipales socialistas, le escribieron a Nicolás Maduro y a Diosdado Cabello Rondón, pero no recibieron respuesta. “Apegados a los principios de moralidad, ética y militancia socialista, nos dirigimos a su competente autoridad moral y política… Los miembros de mesa en su totalidad los colocó el gobernador José Gregorio Vielma Mora, para favorecer la opción Nro.1 del tarjetón… El CNE prestó excelentemente el apoyo técnico, pero como los miembros de mesa los escogió el gobernador, en casi todos los centros electorales, beneficiaron la opción del Nro.1”. Hubo denuncias de que miembros de mesas marcaban por los electores. En otros casos, empujaban a votar por un candidato porque era la “línea del gobernador”. “La cultura adeca de chantajear por cargos a trabajadores y dependientes de la gobernación y algunas alcaldías; después de las elecciones han despedido a quienes apoyaron a María Gabriela Varela”. Se quejan de que Vielma Mora “de manera mal intencionada promovió una campaña destructiva, de difamación contra ella, y al ver que todos los estudios de opinión la daban ganadora, le dio por ofrecerles cargos a algunos líderes municipales y precandidatos”. Vielma ahora la señala de haber firmado contra Chávez. A esa muestra de descalificación por parte del gobernador se ha unido una jauría que por vía de redes sociales la han insultado, vejado y humillado ante el silencio total de los poderosos hombres del chavismo y terriblemente del silencio de las mujeres de ese partido. He ahí.

FALCÓN. Pero si a María Gabriela la han tratado a patada limpia, sus propios compañeros de partido, tres mujeres en Falcón no se quedan atrás. Son las únicas diputadas del Consejo Legislativo, a quienes se les ocurrió reclamar un acuerdo que contemplaba que una de ellas sería la presidenta. Allí es pecado aspirar al poder si usted no tiene el apellido Montilla. Las tres diputadas del Psuv postularon su fórmula que sorpresivamente ganó por el respaldo de los dos únicos diputados de la oposición. Las tres mujeres fueron llamadas domésticas, traidoras, las han vejado, insultado y  humillado, también con el silencio de la dirigencia regional. El jefe del partido en Falcón, que es el esposo de la gobernadora, que es diputado, y con un hijo en la alcaldía de Coro, dijo que esas mujeres tenían que ser destituidas por pactar con la derecha y las botaron. Hace unos días 20 alcaldes del Psuv pactaron con tres alcaldes de la oposición para apoyar a la gobernadora Montilla, contra otro alcalde chavista, al que sacaron arbitrariamente de la coordinación municipal del partido y a quien no sólo le publicaron un comunicado en cayapa sino que le llegó la contraloría, que no ha investigado un solo caso de corrupción del gobierno regional que tiene casi 100 obras inconclusas. ¿Esos alcaldes no deberían ser destituidos del Psuv por pactar con la oposición? El alcalde Pepe Iglesias explicando cómo se hizo ese acuerdo dijo que al burgomaestre opositor Elisanower la gobernadora le prometió dos camiones cisterna.

MINISTRA. Un caso no menos penoso fue lo que le ocurrió a la actual ministra de la Mujer, Gladys Requena. Ella aspiraba a repetir como diputada por el estado Vargas. Le cerró el paso el gobernador García Carneiro, para colocar a su esposa, que es ahora la candidata. Es un terrible precedente el que se ha instaurado en Venezuela, por hombres del chavismo y oposición, quienes postulan a sus mujeres imponiéndolas en cargos para mantenerse ellos con poder.

 

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