Alexis Valdés esconde en su personalidad sencillez, solidaridad y determinación. Es un verdadero “hombre orquesta” capaz de columpiarse entre los roles de actor, director, humorista, guionista, productor, compositor e intérprete. El cubano de 52 años estudió ingeniería pues soñaba con ser científico pero la vida lo llevó a actuar, “y me gustó”, afirma. “Aprendí en la calle, de manera natural, mi padre era actor y cuando lo veía actuar, me generaba inquietud. Así me ha pasado con todo. En la universidad estudié dirección, todo lo demás fue de la vida”, añade. Miami Diario
Se considera curioso y amante del absurdo. “Me gusta acercarme al conocimiento, al pensamiento, a la filosofía y a la reflexión”, señala. Su inspiración es la vida, el resto es imaginación. “Trato de llevar lo cotidiano a un hecho más especial para que pueda ser interesante en un escenario”, agrega.
Pronto en Cuba se volvió famoso y, una invitación a presentarse en España, le permitió salir de la isla y continuar su carrera. Como muchos cubanos, anhelaba conocer otros horizontes, por eso ve la reciente apertura con esperanza. “Todo lo que comienza con una intención de diálogo y de entendimiento es bueno”, acota.
Ama el teatro y afirma sentirse muy exitoso en este medio, pues le permite tener el tiempo para esmerarse y presentar proyectos de calidad. Su obra “Oficialmente Gay”, por ejemplo, tiene unos 15 meses en la cartelera del Teatro Trail con la mayoría de sus funciones sold out. “Es eso lo que encuentro en el teatro que en la televisión no he podido”, comenta. Y aunque lleva en su trayectoria muchos años de experiencia televisiva, Miami no le ha dado la proyección que tanto quiere. “Me encanta la televisión bien hecha- asegura-. Me gustaría hacer algún proyecto que tuviera una visión de mayor alcance, donde pueda expresar todos mis talentos. Hacer televisión sólo por dinero no es suficiente, porque yo quise ser artista no cobrador”, asegura.
Cuando reflexiona sobre el camino recorrido, lo hace de manera gráfica. “Mi carrera es como dos líneas que se cruzan, cuando comencé estaba soñando, estaba alto; pero me tocó poner los pies en la tierra al darme cuenta que no tenía todas las herramientas que necesitaba. Luego comencé a construir experiencia y esa visión se volvió más aterrizada”, describe. Está ahora en el punto de cruce, que es estable y reconfortante.
El humor lo ha acompañado en toda su vida. “La risa es un acto liberador, te conecta con la alegría, te aleja de enfermedades, del miedo. Es la mejor medicina que existe. Soy un admirador profundo de la risa y de aquellos que tienen la capacidad de provocar la risa. En la medida en que el mundo avanza hacia angustia e incertidumbre, en la misma medida va a necesitar la risa; por eso hago lo que hago”, reflexiona.
Este fin de semana presenta su show “Cambie de Canal”, una terapia de risa en la cual habla de la vida, el amor y del exceso de preocupaciones con monólogos, canciones, chistes y más. “Es mi manera más brillante de presentar lo que soy. Los espero con mucho cariño para reírnos y disfrutar juntos”, finaliza.
La cita es este sábado cinco de septiembre a las 10.30pm en el Teatro Trail. Para más información visitar:http://www.teatrotrail.com