De todo un poco: Ahora también tenemos bachaqueros de pasajes aéreos

De todo un poco: Ahora también tenemos bachaqueros de pasajes aéreos

Foto Archivo
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Para poder tocar este tema, primero tendremos que definir qué es un bachaquero.

El bachaquero es aquel que se la ingenia por medio de trabajo, contactos, viveza y dinero para acceder a productos que escasean para revenderlos a precios muy superiores a lo normal. Algo parecido al revendedor de entradas en la puerta del estadio para un juego entre el Real Madrid y el Barcelona.

Para que existan bachaqueros, es necesario que haya personas que estén dispuestas a usar sus servicios y pagar por los productos un sobreprecio o la propina solicitada. También es necesario que las autoridades no hagan nada o muy poco para frenarlos.





Si usted es de lo que compra café, Harina Pan, pañales, cauchos o baterías a un precio muy superior o pagando propinas, está apoyando y perpetuando al bachaqueo.

En Venezuela, probablemente, todos seamos cómplices y estemos felices de conocer a algún bachaquero que nos facilita la vida. Pero claro, todo cambia cuando un bachaquero empieza a afectar a nuestro negocio.

Si un agente de viajes pierde una venta por este motivo, se llena de indignación y ni se le ocurre pensar como se siente el dueño de un supermercado que compite con buhoneros y bachaqueros, personas sin estudios, oficinas, pagos de alquiler de local, permisos, patentes, ni licencias, que tienen en abundancia los productos que él mismo no puede ofrecer y los venden descaradamente en la puerta de su negocio.

A continuación, nos permitimos definir algunos tipos de bachaqueros en nuestra industria y cómo logran acceder a productos que no están disponibles para todos.

 

 

 

– Grandes agencias, grupos y consorcios de agencias

Debo aclarar que es injusto y totalmente incorrecto decir que éstas caen en la categoría de bachaqueros.

Pero el hecho es que debido a su alto volumen de ventas, estos grupos ejercen mucha presión con buenos resultados sobre las aerolíneas, para que les garanticen más cupos, mejores tarifas y condiciones. De ahí que muchas veces, una agencia normal o un freelance, no consiguen asientos para sus clientes o los obtienen a una tarifa alta, o tal vez, solo en dólares.

Unos días más tarde, descubren que sus pasajeros, compraron sus boletos en otra agencia, a un precio más barato y a veces, hasta en bolívares. No es un secreto que hay empleados de algunas de esas agencias que, con o sin la anuencia de sus dueños, también se benefician personalmente de esta ventaja competitiva. En otras palabras, bachaquean.

– Empleados de aerolíneas

Existen empleados que por su posición o contactos internos en la empresa, logran conseguir cupos que permanecen misteriosamente cerrados. Saben que tienen oro puro en la mano y los ofrecen al mejor postor.

En el aeropuerto, hay empleados que al cerrar un vuelo, notan quiénes fueron no-shows y los reservan para el día siguiente o para los días y horarios de más demanda. Así ya tienen cupos disponibles de pasajeros que saben que no van a viajar y los van ofreciendo a quien mas les dé.

Hay aerolíneas nacionales donde nunca hay cupo a ninguna parte. Cuando se ha hecho la prueba y utilizado el lenguaje apropiado, los cupos van apareciendo milagrosamente.

Así lo hizo un amigo mío que viajó a Margarita y terminó pagando Bs. 9.000 de más, 3 mil por cada miembro de su grupo familiar. Hemos escuchado de personas que han pagado hasta Bs. 14.000 de propina para conseguir un boleto en bolívares a Buenos Aires. Si se trata de boletos en dólares, imagínese las ganancias del empleado que cobra 30 o hasta 50 dólares de propina por pasajero.

La escasez de cupos nacionales debido a la reducción de la oferta, ha también provocado una gran demanda a sitios como Maracaibo o Porlamar, donde es muy común en el aeropuerto, tener que ‘pasar algún dinerito’ para conseguir cupo.

– Agencias de viajes

Según me informan algunas aerolineas, existen agencias que son ‘dueñas’ de sus empleados. Los ‘compran’ ofreciéndoles dinero y también a sus supervisores para que les faciliten cupos.

Hay empleados de aerolíneas que le informan a ciertas agencias por adelantado, cuándo y qué vuelos se van a abrir para darles tiempo de vender y prepararse para el momento. Eso seguro no acontece de gratis.

Una aerolínea que inauguró vuelos a la República Dominicana, recibió en una tarde más de cien pasajeros con destino a Europa vía SDQ emitidos en boletos en bolívares de una línea aérea europea aliada con la que tienen un acuerdo interline. Obviamente, alguien de una de las dos aerolíneas, le pasó el dato a esa agencia para que tuviera tiempo de llamar a interesados, cobrarles y emitir.

– Fantasmas y estafas

También tenemos agencias, generalmente desconocidas o fantasmas, que no tienen nada que vender, pero que siguen ofreciendo por redes sociales pasajes a Miami en Bs. 50.000 y ofertas similares en busca de incautos. Las estafas han sido cuantiosas.

– Freelance

La mayoría de los freelance son profesionales con alta trayectoria y excelente reputación, pero esta situación que vivimos, ha incrementado el número de empleados independientes desconocidos, que se prestan a estafas con tarjetas y bachaqueo, frecuentemente, sin el conocimiento de los dueños.

Mega gestores

Los todo poderosos gestores de los aeropuertos siempre han existido y operan pequeñas redes de contactos con empleados de las aerolíneas, supervisores y autoridades y pueden obtener y solucionar casi cualquier problema, cupos, exoneración de exceso de equipaje, un certificado de vacuna faltante y hasta un sello en un pasaporte.

Medidas preventivas

Las aerolíneas aplican una intensa labor de vigilancia y prevención de estas prácticas. Graban y tratan de escuchar las conversaciones de los empleados, les prohiben el uso de celulares, investigan cualquier petición y comportamiento inusual y con frecuencia, denuncian a los culpables ante los autoridades. Incluso, la mayoría de las aerolíneas, no permiten a sus empleados comprar pasajes y si de familiares cercanos se trata, les exigen demostrar documentos de identificación para verificar los nexos.

El control de cambio y sus tentaciones

La causa y el origen de toda esta problemática es el control de cambio con sus ridículas tasas para convertir dólares de pasajes a bolívares.

Mientras haya venta en bolívares a tasas imaginarias, habrá más gente que querrá comprar en bolívares, ya que no los pueden utilizar para nada más y porque viéndolo bien, en ‘real money’, no importa si los boletos a Miami cuestan $ 40.000, pues al multiplicarlos por 13.50, serán más baratos que pagarlos usando billetes verdes.

Los dólares preferenciales son otra gran presión para sobornar, bachaquear y hacer cualquier cosa incorrecta o ilícita. ¿En qué otra parte de la tierra se puede comprar un dólar americano por solo 0.07 centavos?, a menos de un ‘dime’, como llaman a la moneda de 10 centavos de dólar.

Mientras exista la distorsión de los dólares de viajero, tarifas en dólares y otras en bolívares, subsidiados por el gobierno, habrá escasez de pasajes y el problema no desaparecerá.

Parece que al final, todos somos víctimas de los bachaqueros. Solo que a unos los queremos y necesitamos y a otros, los odiamos.

Daniel Piske/ Viajes Boletin