Joaquín Chaparro: Maracaibo pide agua

Joaquín Chaparro: Maracaibo pide agua

 

El agua, es un derecho humano universal esencial; por ello, tiene que ser garantizado como inalienable e inviolable de las personas, tomar en cuenta la calidad de la misma para el consumo humano. Es un recurso natural finito e indispensable para la vida, por tanto, tiene que ser regulado con criterio de eficiencia y de solidaridad sobre la base de los principios de igualdad, equidad, sin discriminación política, ni injusticia social.

El agua potable, es imprescindible para que todos tengamos acceso a su abastecimiento. De allí, que los movimientos sociales, organizaciones no gubernamentales, sociales, comunales, sindicatos, partidos políticos, candidatos a la AN y demás entidades relacionadas con el que hacer de la ciudadanía, deben hacer pública su descontento social por la falta de agua en Maracaibo, al mismo tiempo, velar por una real y efectiva gestión pública a través de una contraloría social que reconozca su derecho a decidir sobre un servicio tan importante.El agua, es un derecho humano para avanzar en desarrollo y mejorar este modelo de gestión fracasado llamado “socialismo del siglo XXI”. Por esa razón, debemos cuanto antes, establecer planes de investigación, de desarrollo e innovación tecnológica mediante la colaboración de Universidades, colegios profesionales afines, con expertos en la materia, para contribuir en corto plazo con el mejoramiento continuo del servicio. Al respecto, creo imprescindible establecer un modelo de gestión integrada, que permita tener una visión de conjunto acerca de los servicios públicos en general.

Es hora de activar procesos de planificación a largo plazo para desarrollar, acordar e implementar acciones que integren todos los aspectos de la nueva red de distribución del agua, incluida su reutilización. Considero que el agua y su ecosistema representan bienes comunes que forman parte del patrimonio natural de la colectividad. Por su relevante valor ambiental, la administración pública en general, tiene la obligación de preservarla y de protegerla. Visto así, sugiero un modelo de gestión pública desde una perspectiva socio-ecológica donde se respeten los derechos de los ciudadanos a un servicio de interés general como el agua. Declaro expresamente que, con independencia del gobierno de turno, se asuma la gestión integral del agua por los municipios.

Sobre esta situación, las Alcaldías deben velar, por controlar la sostenibilidad y distribución integral del agua en cada ciudad. En Maracaibo, se debe cuidar la calidad del agua, su distribución y la conservación de los ecosistemas hídricos (Lago de Maracaibo, ríos y embalses) porque son fuentes de recursos para el consumo humano y asegurar el uso mínimo del recurso necesario para satisfacer las necesidades de la gente en  la tierra del sol amada. Para eso, se deben realizar programas de prevención de la contaminación, deben estructurarse y planificar las inversiones necesarias para que el agua llegue a todas las personas en las mejores condiciones; a fin de controlar y minimizar las pérdidas en las redes de suministro.

Esto es, un desafío que estamos dispuestos a afrontar, promoviendo una gestión ciudadana apropiada, decente. No obstante, entiendo que no basta con garantizar la gestión pública, sino que es preciso promover nuevas formas de control social, profundizar la democracia participativa, a fin de que se garantice la transparencia.  Por ello, apuesto por un modelo de gestión en el que el ente público gestor rinda cuentas de sus actividades, así como de sus decisiones, tanto a los poderes públicos de los que depende, como a la ciudadanía. Además, es fundamental que en los procesos de planificación, se facilite la implicación de todas las personas y actores sociales vinculados al servicio urbano del agua, promover los consensos necesarios para avanzar en base a principios comunes entre la gente.

Como ciudadano, estoy dispuesto a trabajar en una campaña de concientización y de aprendizaje de buenos hábitos en el uso racional del agua, fortalecer la calidad del agua potable, para mejorar su utilización y las redes de distribución, porque Maracaibo pide agua.

Twitter: @joaquinchaparro

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