Juan José Moreno A.: Con todo respeto doña Tibisay  

Juan José Moreno A.: Con todo respeto doña Tibisay  

thumbnailjuanjosemorenoSi en algo somos respetuosos los venezolanos es en el trato con las mujeres, y es una cualidad que no perdemos las personas verdaderamente sensatas, aun ante las situaciones más retadoras de la paciencia humana. Quizás por esta realidad, muchos nos abstenemos de hablar o comentar actitudes de personas que, presumiendo la obligación de ser toleradas por su condición de féminas, incurren en acciones que atropellan y vulneran los derechos más elementales de los ciudadanos de este país. Y el caso que nos ocupa tiene que ver precisamente con alguien que tiene la altísima responsabilidad de actuar como árbitro imparcial en los procesos electorales del país y que, en opinión de una gran porción de la población, no cumple con este requisito.

Pese a que los comentarios de la señora Tibisay Lucena se produjeron hace exactamente una semana, en complaciente entrevista facilitada por el moderador de un programa, José Vicente Rangel, abiertamente identificado con el régimen actual, no podemos dejar de sumarnos al coro de voces que han expresado sus críticas a las palabras de la presidenta del CNE.

Porque muy apegada al estilo gubernamental de descalificar personas que gozan de mucho prestigio en los ámbitos del país y de otras naciones, doña Tibisay se permitió la ligereza de calificar de ignorantes a presidentes de otros países que han llegado a emitir opinión sobre nuestros procesos y a la necesidad de contar con la presencia de observadores de organismos internacionales para constatar el cumplimiento de las normas establecidas en esta ocasión para las venideras elecciones del 6 de diciembre.





Y cualquiera que no viva en Venezuela podría creer, por la forma, seguridad y gestos de las que hace gala al hablar, que la funcionaria tiene el “toro agarrado por los cachos” y que el proceso se cumple y se cumplirá apegado a la ética y las normas que deben regir para un proceso electoral, y especialmente el caso específico de estas elecciones paras las cuales nos preparamos. Pero no, la entrevistada y el entrevistador, dicen las cosas de una manera que pareciera que la presidenta del CNE es injusta y cruelmente atacada personalmente por “grupúsculos” que, de paso, no llega a identificar.

Pero no es así señora Tibisay, estamos seguros que muy paciente ha sido el pueblo venezolano y especialmente la dirigencia opositora, al no ser contundentes en las exigencias y reclamos como los que nos permitiremos nombrar para refrescar su memoria, o simplemente para aportarle algunas informaciones que pudiera obtener más fácilmente de primera mano a través de las redes sociales en las que usted, lamentablemente, no se ocupa de escudriñar, porque las que obtiene de los medios afectos a su ideología no se le aporta. Veamos solo algunas:

¿Desconoce usted, señora Tibisay, que el propio Presidente del la República encabeza de una manera descarada la campaña electoral en marcha, aunque no haya sido oficializada como tal, en la que se hace uso de recursos humanos y materiales del Estado (dinero, vehículos y estaciones de radio y televisión oficiales y no oficiales) para promover a los candidatos de esa cosa que llaman Polo Patriótico, mientras usted, en una de sus  características “advertencia” se limita a expresar que solo a partir del 13 de noviembre se dedicará a tomar nota de todo ese tipo de denuncias?

¿Ha escuchado usted por mera casualidad, doña Tibisay, las expresiones del ciudadano Presidente en las que abiertamente amenaza con dar pelea junto con sus seguidores, si llegara a ganar la oposición, como se supone que sucederá de una manera abrumadora: o también esperará al 13 de noviembre para pronunciarse sobre tal aberración gubernamental?

¿Se ha enterado usted, distinguida señora, que en una acción de esas que en el argot criollo llamamos ”tracalería”, un sujeto mejor conocido en la política como el saltarín de talanqueras, en esta oportunidad cuadrado con el propio régimen, logró que el consejo electoral que usted preside le diera un espacio en el tarjetón, justo al lado de la tarjeta de la verdadera oposición y la única de la UNIDAD representada por el MUD, con descarados fines de confundir al electorado, y que el propio Presidente se preste al jueguito presentándola ante los medios de una manera “inocente” como tarjeta de oposición, con similar propósito?

¿Y qué decir de su propia convalidación de la trampa que refleja la maniobra del Presidente y su partido de armar el mamotreto llamado pacto de respecto a los resultados, cuando es bien sabido que tal respeto está implícito en las solas condiciones que toda organización participante en el proceso electoral acepta al validarla su inscripción  ante el CNE?

¿Y qué decir de su aparente ingenuidad al tratar de restar la importancia de la observación, como corresponde, de misiones extranjeras, como la OEA y la ONU para, en todo caso, corroborar que lo que usted afirma sobre la pureza del proceso?

Todas esas respuestas, doña Tibisay, si usted no las tiene sí las tiene y conoce el pueblo y, con todo el respeto, podemos decirle, que será precisamente ese pueblo el que el 6 de diciembre se ocupará de filmar su destitución del cargo  al que pareciera aferrarse a perpetuidad. Y usted perdone.

@JJMorenoA