Renuncia el presidente de la Federación chilena de fútbol

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La federación chilena de fútbol oficializó el miércoles la renuncia de su presidente Sergio Jadue, quien en la víspera abandonó sorpresivamente el país rumbo a Estados Unidos.

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Jaime Baeza, presidente interino de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), confirmó que Jadue renunció en una carta con fecha del miércoles, luego que el directorio le solicitara en dos ocasiones dejar el puesto. Baeza declinó responder a preguntas sobre la posible colaboración de Jadue con las autoridades estadounidenses que investigan la corrupción en la FIFA.





“No contamos por el momento con información adicional”, dijo Baeza al respecto. El directorio de la ANFP se reunió por varias horas antes de anunciar la renuncia de su presidente.

Presionado el martes por periodistas que querían saber el motivo de su abrupto viaje a Estados Unidos, un demacrado Jadue susurró en el aeropuerto de la capital chilena que se iba de vacaciones con su esposa e hijos pequeños. En Chile aún no concluye el año escolar.

Jadue guardó silencio ante las reiteradas preguntas de si se convertiría en un testigo de la justicia estadounidense en el caso de corrupción que envuelve a la FIFA.

El viaje se produjo pocos días después de la renuncia del presidente de la federación colombiana de fútbol, Luis Bedoya, quien se alejó también en medio de rumores de que estaría negociando con las autoridades estadounidenses.

A su regreso de un viaje de Brasil, el jueves, Jadue descartó enfáticamente renunciar a la ANFP y reiteró que no estaba relacionado con la corrupción en la FIFA.

Jadue aún es tercer vicepresidente de la Conmebol. Dos ex presidentes del organismo rector del fútbol en Sudamérica, el paraguayo Nicolás Leoz y el uruguayo Eugenio Figueredo, están acusados y detenidos como parte del caso estadounidense.

Los 10 presidentes de las federaciones de la Conmebol fueron vinculados directa o indirectamente por los investigadores estadounidenses a los actos de corrupción en la FIFA. Según las indagaciones, una empresa de marketing deportivo que compró los derechos de tres ediciones de la Copa América aceptó pagar 110 millones de dólares en sobornos que se habrían repartido entre dirigentes de la Conmebol y los presidentes de las federaciones sudamericanas. Los investigadores no dijeron si todos los dirigentes recibieron dineros sucios.