El delantero uruguayo Luis Suárez aseguró este miércoles sentirse “libre” una vez finalizada la sanción de nueve partidos sin jugar con su selección decretada por la FIFA tras su famoso mordisco en el Mundial de Brasil 2014.
AFP
“Ayer definitivamente se terminó y puedo decir que soy libre”, aseguró el delantero charrúa en una rueda de prensa con su equipo, el FC Barcelona, a pocos días de jugar el clásico de la Liga española ante el Real Madrid.
“Los últimos partidos los viví con mucha ansiedad, no veía la hora que terminaran los partidos para acabar con la sanción”, señaló.
El noveno partido de sanción de Suárez se cumplió el martes con el choque entre Uruguay y Chile clasificatorio para el Mundial de Rusia-2018, en el que la selección celeste se impuso con un contundente 3-0.
Sin su delantero estrella, los uruguayos mostraron un elevado rendimiento en estos clasificatorios con tres victorias y una sola derrota que los sitúan segundos de la tabla a tres puntos del sorprendente líder, Ecuador.
“Quiero felicitar públicamente a mis compañeros porque han hecho un trabajo espectacular, magnífico”, dijo Suárez.
El ariete, sancionado durante cuatro meses y nueve partidos internacionales por morder al italiano Giorgio Chiellini en Brasil, también quiso reivindicar a sus compañeros, muy criticados por su papel en la Copa América de junio pasado.
Sin Suárez, los charrúas cayeron en cuartos de final contra los futuros campeones, Chile (1-0), tras una discreta fase de grupos.
“A uno le dolía, al orgullo de los uruguayos y a los compañeros nos molestó”, afirmó. Estos últimos resultados “son una demostración de que Uruguay no depende de nadie y es una cuestión de estar unidos el sacar adelante esto con fuerza, voluntad y fútbol”, dijo.