Pistorius, declarado en apelación culpable del asesinato de su novia

Pistorius, declarado en apelación culpable del asesinato de su novia

(Foto REUTERS/Siphiwe Sibeko)
(Foto REUTERS/Siphiwe Sibeko)

El Tribunal Supremo de apelación de Sudáfrica declaró el jueves al campeón paralímpico Oscar Pistorius culpable de “asesinato” por la muerte de su novia Reeva Steenkamp, por lo que puede ser condenado a una pena de al menos 15 años de cárcel.

El acusado es “culpable de asesinato, al haber tenido intenciones criminales” en el momento de los disparos, declaró el juez Eric Leach, al final de una larga lectura — retransmitida en directo por varias cadenas de televisión sudafricanas — de las conclusiones del Tribunal Supremo de Bloemfontein (centro).

“El caso, dijo, fue reenviado a la jurisdicción de primera instancia para revisar la sentencia”.





Esto no implica un nuevo proceso, sino simplemente una nueva deliberación para modificar la pena de cárcel.

En primera instancia, el héroe discapacitado de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012, fue condenado a cinco años de prisión por “homicidio involuntario”, por haber matado de cuatro disparos a su novia a través de la puerta del baño de su casa de Pretoria, en la noche de San Valentín de 2013.

La fiscalía había apelado con la esperanza de obtener una condena por “asesinato”.

June Steenkamp, la madre de la víctima, estaba presente en los bancos del tribunal de Bloemfontein, y permaneció impasible durante el anuncio del veredicto, abrazada a una allegada. Su marido, desde su ciudad de Port-Elizabeth, declaró en una televisión sudafricana que estaba “satisfecho” con este nuevo veredicto.

Pistorius, de 29 años, salió de prisión en octubre, después de un año, y fue puesto en arresto domiciliario en la ostentosa vivienda de su tío mientras realiza trabajos para la comunidad.

Según Bulelwa Makeke, portavoz de la fiscalía, debería continuar bajo el régimen actual hasta el pronunciamiento de la nueva sentencia, que podría llegar a principios de 2016.

– ‘Inconcebible’ –

El Tribunal de apelación, que se pronunció sobre la ley y no sobre los hechos, no ha cuestionado la versión del acusado, que no estaba presente el jueves en Bloemfontein, lo cual es normal en el proceso de apelación sudafricano.

Pistorius nunca negó haber matado a Reeva. Pero siempre sostuvo que creía que un ladrón entró en la casa, y que ignoraba que su novia ya no estaba en la cama en el momento de disparar.

Los cincos magistrados, hablando de un “error fundamental” de interpretación de la jueza de primera instancia, mantuvieron el hecho de que el exdeportista, disparando cuatro balas de gran calibre en la puerta de un estrecho lavabo a la altura de un hombre, no podía ignorar que arriesgaba la vida de alguien, cualquiera que fuese la víctima.

El juez Leach se sirvió del ejemplo del autor de un atentado con bomba, que ignora la identidad de sus víctimas, pero que evidentemente es culpable de asesinato porque tiene la intención de matar.

Además, recordó el magistrado, Pistorius dijo él mismo que no tenía ningún contacto visual o vocal con el presunto ladrón. Disparó porque oyó ruido. El acusado “no sabía en absoluto si esta persona constituía una amenaza”, anotó.

En estas circunstancias, “es inconcebible que un hombre razonable haya podido pensar que estaba autorizado a disparar con un arma de gran calibre”. Es por ello, dijo, que Oscar Pistorius “no tendría que haber sido condenado por homicidio involuntario, sino por asesinato”.

Oscar Pistorius, antes de la fatídica noche de San Valentín de 2013, era un icono del deporte mundial. Amputado de las dos piernas a partir de las rodillas, corría con prótesis de carbono blandas que le valieron el apodo de “blade runner”.

Varias veces campeón paralímpico en atletismo, conoció el apogeo de su gloria en los Juegos Olímpicos de Londres de 2012, cuando se le autorizó a alinearse en los 400 metros con los demás atletas, llegando a la semifinal. AFP