La teniente alcalde y cuatro regidores de un municipio peruano fueron detenidos por presuntamente contratar a sicarios para asesinar al alcalde del distrito de Samanco en la región norteña de Ancash y a su abogado, informó el Poder Judicial.
AFP
“Por los testimonios de los detenidos, involucrados en el doble crimen, y las evidencias que se han recogido en el caso, todo indica que el móvil fue político, por lucro y por asumir el control de las obras en Samanco”, dijo a la prensa el jefe policial de Chimbote, Juan Mayer.
El 20 de octubre, el alcalde Francisco Ariza y su abogado Henry Aldea murieron tras ser acribillados cuando se desplazaban en un auto en el distrito de Nepeña. La muerte de Ariza permitió que Fanny Malqui, teniente alcalde del municipio, asumiera como titular de la alcaldía.
Ella, los cuatro regidores y cinco integrantes de la denominada banda Los injertos de Chimbote fueron capturados por la policía la semana pasada. Según la fiscalía de Nepeña, que investiga el caso, a Malqui y sus regidores se les acusa de planificar y ser autores intelectuales del doble asesinato por lucro e intereses políticos.
Los autores intelectuales habrían pagado a los sicarios entre 3.000 y 5.000 soles (entre 880 y 1.470 dólares) por el crimen.
El último lunes, el quinto juzgado de la Corte Superior de Justicia del Santa, la provincia a la que pertenece el municipio, aprobó la ampliación de la detención preventiva de los detenidos.
La acción de sicarios y extorsionadores se ha incrementado en el último año en Perú. Gobernadores y alcaldes de distintas ciudades han pedido al gobierno que declare en emergencia sus ciudades y permita el apoyo de las Fuerzas Armadas en las labores de seguridad.
La semana pasada, el gobierno decretó estado de emergencia en la provincia costera del Callao, ante el riesgo de enfrentamientos de bandas rivales de narcotraficantes, y envió al lugar a las fuerzas especiales de la Policía Nacional.