Chavismo analiza la derrota del 6D mientras la oposición hace planes

Un seguidor de la oposición en Venezuela con una franela en la que se lee "Maduro estás perdido" grita mientras celebra en Caracas la victoria en las elecciones legislativas de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), 7 de diciembre de 2015.  Como un león herido, el chavismo venezolano se guarecerá hasta que sanen sus heridas tras la aparatosa derrota que le propinó la oposición en las elecciones parlamentarias del fin de semana, e iniciará una serie de reuniones intestinas para autoevaluarse. REUTERS/Nacho Doce
REUTERS/Nacho Doce

Tanto el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, como exfuncionarios chavistas, invitaron  a analizar y a rectificar errores tras la derrota sufrida por el oficialismo en las legislativas que se celebraron el pasado domingo, mientras la oposición hace planes desde ya para su gestión como mayoría parlamentaria.

Nélida Fernández/EFE

El gobernante asumió esta jornada que su Gobierno cometió errores “de burocracia” con una “corrupción que envolvió las políticas revolucionarias”, lo que influyó en la derrota electoral, aunque aclaró que el principal enemigo es “la derecha fascista” y la “guerra económica” que, asegura, le hizo la oposición a su mandato.





Maduro hizo esta reflexión ante varias decenas de personas que se apostaron frente al palacio presidencial de Miraflores para manifestarle su apoyo tras este “revés electoral” y a quienes el mandatario pidió incorporarse a un debate para encontrar una “estrategia” que fortalezca la “revolución bolivariana”.

“Hay un conjunto de problemas, de errores acumulados que el pueblo debe saber que yo estoy perfectamente consciente y he convocado a un diálogo con el pueblo”, señaló.

No obstante, el gobernante también reiteró en su discurso que el enemigo es “la derecha fascista contrarrevolucionaria que ha obtenido un éxito electoral” y sus “aliados” que se esconden “en distintos cargos” y afirmó que le hará frente a las supuestas amenazas de la oposición de derogar leyes “del poder popular”.

Dijo estar dispuesto, además, a “encabezar una revolución radical, socialista, popular” en vista de las supuestas amenazas de la nueva mayoría parlamentaria.

“Ha triunfado una contrarrevolución fascista (…) utilizando las reglas de la democracia y ahora está amenazando al pueblo de quitarle las misiones, la educación, la Ley del Trabajo”, señaló.

Apuntó, no obstante, que “las revoluciones a veces necesitan el látigo de situaciones adversas” y “el latigo de la contrarrevolución” para despertar.

Entretanto, los exministros venezolanos Héctor Navarro y Jorge Giordani pidieron al Gobierno de Maduro que “rectifique” y retome el rumbo social tras la derrota electoral que sufrió el oficialismo el domingo al lograr solo 55 escaños contra 112 de la oposición.

“Que den una explicación clara de que hay una intención de rectificar, de hacer lo que decía Hugo Chávez (presidente fallecido, 1999-2013), revisión, rectificación y reimpulso. Si no hay una voluntad política clara de rectificación vamos a un desastre todavía mayor”, dijo Navarro, exministro de Educación y de Electricidad.

Navarro recordó que Chávez pidió a los funcionarios en 2011 combatir “el oportunismo, el sectarismo, el nepotismo” que alejan al Gobierno “de la base social bolivariana”, una solicitud que, dijo, hoy sigue muy vigente.

El exjefe de la cartera de Educación dijo que esta derrota en las legislativas “es el preludio de todo lo que pueda ocurrir”.

Giordani, vicepresidente de Planificación durante la Administración de Chávez y primer año de mandato de Maduro, pidió que se investigue la corrupción en el Gobierno y que solo hace falta que se le aplique “a muchos” funcionarios el mecanismo “de la renta presunta” y se les pregunte dónde obtuvieron su nueva fortuna.

Esta solicitud de investigar la corrupción dentro del Gobierno la han hecho Navarro y Giordani en el último año, una petición a la que también se ha sumado la también exministra chavista Ana Elisa Osorio.

Los exfuncionarios dieron estas declaraciones en una rueda de prensa que fue interrumpida por un pequeño grupo de simpatizantes del Gobierno de Maduro, que llamó “traidores” a los que fueran ministros de Chávez.

Por su parte, desde un acto que encabezó como gobernador del céntrico estado Miranda, el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles dijo que la nueva mayoría parlamentaria “le pondrá la lupa al Ministerio de Salud” pues “los hospitales están por el piso”.

“También nuestros parlamentarios van aprobar una ley para entregar títulos de propiedad a los beneficiarios de la Misión Vivienda”, agregó el líder opositor, quien agregó que estos diputados también legislarán para que las universidades públicas tengan un presupuesto justo.

Apuntó, además, que la bancada opositora “le meterá el pecho” al problema de la violencia y la inseguridad en el país.

Por su parte, el secretario general del histórico partido Acción Democrática (AD), el electo diputado opositor Henry Ramos Allup, criticó esta jornada que Maduro pidiera a sus ministros poner sus cargos a la orden con miras a una reestructuración y sugirió que sea él quien dimita.

“Si Maduro fuera consciente (…), si Maduro renunciara, tendríamos elecciones en treinta días”, dijo Ramos Allup, quien también consideró “difícil” que este Gobierno llegue a su fin “natural” en 2019. EFE