Todo era expectativa, y con justa razón. La primera sesión ordinaria de una Asamblea Nacional mayoritariamente oficialista, luego de la evidente victoria de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en los comicios del 6 de diciembre, sin duda que es un hecho que generaría expectación hasta en el menos curioso. Y así fue, publica Correo del Caroní.
La jornada transcurrió con aparente normalidad, entre aprobación de presupuestos, créditos adicionales, nombramientos oficiales, y como era de esperarse, con el desespero a flor de labios del hasta ahora presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.
En esto último, Cabello se refirió una vez más a los resultados electorales, asumiendo de una vez por todas que sí, que la ciudadanía aplicó su voto castigo al oficialismo. Solo que esta vez, en su intento de satanizar a la oposición, llamó a los electores a estar alerta, pues afirma que ahora el castigo irá contra ellos.
“Hubo voto castigo, es verdad, el pueblo votó el domingo y dentro de poco viene el castigo, el castigo cuando esta Asamblea Nacional no apruebe los créditos adicionales para las pensiones, el castigo cuando esta Asamblea Nacional no apruebe los créditos adicionales para la construcción de viviendas, el castigo cuando comiencen a derogar la Ley del Trabajo, cuando a comiencen a derogar la Ley de Precios Justos (…) cuando estén arrodillados a Fedecámaras y al imperialismo, ese va a ser el castigo”, especuló Cabello sobre el mandato de la MUD en el Parlamento.
Sus palabras no solo reeditan parte del chantaje político de la campaña (dádivas a cambio de votos), sino que contradicen los planteamientos de la disidencia.
Si algo ha quedado claro este 6D es el apego al civismo, y con ello, a las reglas de juego. Nadie cuestiona que el mandato de esta cohorte parlamentaria es hasta el 5 de enero de 2016, pero Cabello, en un intento de negar lo obvio, asoma otro tipo de escenarios: “El mandato popular que nos dio el pueblo de Venezuela llega hasta el 4 de enero a las 12:00 de la noche, nada ni nadie, (…) ningún fariseismo, no caeremos en chantajes (…) Hasta el 4 de enero a las 12:00 de la noche estaremos aquí en la Asamblea Nacional cumpliendo con el deber que nos corresponde. No hubo, ni hay, ni habrá pacto con la burguesía, la revolución bolivariana seguirá adelante acompañando al pueblo de Venezuela, que más temprano que tarde entenderá”.
Premio a la subordinación
Además de las elucubraciones de Cabello, esta primera sesión de la AN luego de las elecciones parlamentarias tuvieron otros puntos de polémica, como el nombramiento de la ahora ex magistrada del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Susana Barreiros, como defensora pública general.
Barreiros, quien presidió los juicios y liberó a los banqueros Arné Chacón, hermano del ex ministro Jesse Chacón; Ricardo Fernández Barruecos, y al ex jefe de comercialización de la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (Sidor), conocido como el rey de la cabilla, Luis Velásquez, ha sido blanco de críticas no solo por estas liberaciones, sino por haber sentenciado al líder opositor Leopoldo López a 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas por los cargos de: instigación pública, asociación para delinquir, daños e incendio a la sede del Ministerio Público, a propósito de las protestas de 2014.
El diputado Fernando Soto Rojas, ex presidente de la Asamblea Nacional y símbolo de la izquierda romántica guerrillera de la que se reviste el chavismo, aplaudió la decisión, al alabar a Barreiros como una joven audaz y con guáramo y que no se asusta.
“Esta joven Susana creada en el proceso bolivariano y puesta a prueba en una decisión fundamental como fue el juicio contra el señor López que violó flagrantemente a nuestra constitución, que está preso y que va a seguir preso. Yo le advertía a él porque tuvimos una larga conversación cuando él estaba organizando ese partido (…) le dije usted está empezando a organizar una organización, para consolidarla tiene que ser sobre el texto constitucional”, vociferó en su derecho de palabra.
Orden del día
Lo demás fue la orden del día: aprobación del presupuesto para la Asamblea Nacional (más de 5 mil millones de bolívares para gastos varios, entre los que se cuentan “financiar las políticas institucionales, con miras al fortalecimiento de la democracia participativa y protagónica”, según la nota de prensa de la AN); 365 millones de bolívares para la construcción del Hospital Pediátrico del Sur, en Valencia; 22.225 millones para el Consejo Federal de Gobierno; 1.058 millones para el Ministerio de Deporte; 389 más para el de Relaciones Interiores, Justicia y Paz; entre los más destacados.
Así fue el primer día de sesiones en la AN luego del 6D. Esto apenas comienza.