El presidente Nicolás Maduro no asistió a la supuesta visita que realizaría este viernes a Ciudad Guayana, para reunirse con los trabajadores, o mejor dicho con los obligados a asistir bajo amenaza de perder el empleo, con la movilización de autobuses del servicio público, para el traslado de los afectos, y hasta la presencia de alcabalas militares en Puerto Ordaz.
Prensa Notiguayana
El que si estuvo presente, fue el único diputado electo para la asamblea nacional por el PSUV, partido que recibió una paliza “irreversible”, en un estado que “era” rojo-rojito.
Los dirigentes sindicales del FBT, y de otros afectos al oficialismo, alegaron que esta visita de Maduro, tenía el propósito de solidarse con los obreros, ante la supuesta intención de la nueva mayoría parlamentaria de modificar la ley del trabajo, un comentario mediático, que los brillantes asesores de Maduro, pusieron en el laboratorio, fórmula que fracasó estrepitosamente.
Nos imaginamos que ante la posibilidad de un papelón, ante el rechazo recibido el pasado seis de diciembre en el estado Bolívar, a la gestión del actual presidente, presumimos Maduro a última hora, prefirió echarse para atrás.
El acto se realizó en la plaza Monumental de Puerto Ordaz, con una tarima y grandes equipos de sonidos, que pasó desapercibido, sobre todo cuando los guayaneses están mas preocupados por conseguir los aliños para las hallacas, y celebrar navidades y el año nuevo, en sana paz y alegría familiar.