Isidro Alonso: Ensayo sobre la lucidez

Isidro Alonso: Ensayo sobre la lucidez

thumbnailisidroalfonsoEn un día lluvioso de elecciones la mayoría de habitantes de una ciudad vota en blanco. El gobierno, sorprendido por la cantidad de votos en blanco, ordena repetir las elecciones una semana después, pero en esta ocasión el voto en blanco es aún mayor, alcanzando el ochenta y tres por ciento.  Ante esta reacción inesperada de los electores se inicia una serie de investigaciones  implementando acciones autoritarias y represivas, buscando a los responsables de esos resultados. Llegando a afirmar incluso que se trataba de una conjura internacional para socavar las bases del gobierno. Los culpables de tan desleal acto si no se consiguen, se inventan. Aunque fácilmente el relato anterior podría describir la reacción del gobierno de Nicolás Maduro ante la cantidad de votos nulos en las pasadas elecciones, se trata de la novela Ensayo sobre la lucidez de José Saramago, donde el escritor portugués hace una reflexión sobre la respuesta de los gobernantes ante la revolución pacífica de un pueblo agotado de malas políticas en medio de unas elecciones.

La pasada campaña observamos a Maduro, Diosdado y Jorge Rodríguez, entre otros, alabando el sistema electoral, calificándolo de ser el más seguro del mundo. Pero ahora, cuando en el PSUV se han enfilado a buscar culpables no solo de la derrota electoral sino también de la cantidad de votos nulos, llegando incluso a decir que la oposición habría podido hacer trampa, tenemos que preguntarle al gobierno ¿Dónde estaba el CNE cuando ellos hasta el último minuto hacían uso de todo el aparato del estado para favorecer a sus candidatos? ¿Por qué el CNE guardaba y guarda silencio cuando funcionarios chantajean con despedir de instituciones oficiales a quienes no sean verdaderamente revolucionarios? Y así tantas interrogantes que surgen sobre la imparcialidad de nuestro árbitro electoral.

Nicolás Maduro no ha querido darse cuenta que mientras él busca molinos de viento con quien pelear, en este país hay hambre, que a la mayoría de los venezolanos no les alcanza el sueldo para llegar a fin de mes. Que no sirve de nada comprar el voto con tablets, televisores y computadoras cuando la nevera está vacía. Hace tiempo perdieron la sintonía con el pueblo y las mentiras y excusas no las creen ni en los pasillos de Miraflores.





Decir que la cantidad de votos nulos es producto de una conjura para favorecer a la oposición es simplemente absurdo, pero si debe haber una reflexión seria del por qué se produjo. Tal cantidad de votos nulos no es un simple error a la hora de votar. Se tiene que someter a las maquinas del CNE a una profunda investigación y por otro lado tener claro que hay una gran masa de electores que frustrados por el gobierno todavía no se sienten motivados por algunos liderazgos de la MUD

Al final, en la novela de Saramago  cuando el gobierno entiende que  no hay amenazas ni persecuciones que puedan doblegar  la  moral que los ciudadanos pueden alcanzar cuando deciden ser libres, abandonan el poder. Los venezolanos el pasado seis de diciembre demostramos nuestra convicción de querer vivir en libertad. Ahora bien, de llegar Maduro a tomar la decisión  de los gobernantes  de Ensayo sobre la lucidez ¿contamos con liderazgo capaz de convocar al país y unir a los venezolanos?