Aarón Rodríguez: Ahora más que nunca unidad

Aarón Rodríguez: Ahora más que nunca unidad

thumbnailaaronrodriguezFeb2015Para nadie es un secreto que Venezuela atraviesa hoy uno de los momentos más difíciles de su historia, a pesar de que algunos diputados oficialistas en la Asamblea Nacional se atrevan a preguntarse públicamente -con el mayor cinismo- “¿cuál crisis?”, como vimos en días recientes en el Parlamento. Y muy a pesar, también, de que el vicepresidente de nuestra nación nos dibuje en su discurso un maravilloso país que no vemos por ninguna parte.

Actualmente tenemos la inflación más alta del mundo aun con los datos maquillados por el Banco Central de Venezuela que la sitúa en 180%, pero sin ser economistas todos estamos conscientes de que la cifra es mucho más alta. Acudir al supermercado se ha vuelto toda una odisea y conseguir los productos de primera necesidad casi se hace comparable a correr un triatlón, por mencionar sólo 2 de muchos otros inconvenientes a los que debemos hacer frente en el día a día.

Así como reconocemos nuestras penurias también somos capaces de identificar los ajustes que el país pide a gritos para salir de este abismo en el que estamos sumergidos y no terminamos de caer; ya 8 de cada 10 venezolanos quiere que Nicolás Maduro deje la presidencia para abrir paso a los cambios necesarios para enrumbar la economía nuevamente por los caminos del progreso y el desarrollo. Sabemos que las vías son muchas y dependiendo del color del partido político existen distintas posturas y visiones al momento de definir el enfoque más adecuado para lograrlo. De eso se trata la diversidad en democracia.





Resulta lógico que en estructuras como la Mesa de la Unidad Democrática, conformada por una multiplicidad de partidos políticos con diferentes enfoques y visiones del país, existan situaciones donde se pongan a prueba la vocación democrática de dicha institución. Lograr la unidad no es algo que se da automáticamente por generación espontánea, es un proceso que se logra gracias a la madurez, el trabajo arduo y la determinación de quienes han entendido que solamente unidos se puede avanzar hacia la consolidación de la república que soñamos.

Así como en una familia no siempre todos sus miembros tienen las mismas posturas ante determinadas situaciones, en la MUD es normal que existan posturas diferentes ante la apremiante situación política, económica y social que nos arropa a todos los venezolanos. Pero como en toda institución democrática, donde es permitido el pensamiento libre, la Unidad ha sabido superar las diferencias y buscar los puntos en común de encuentro para lograr victorias importantes como la del pasado 6 de diciembre.
Ahora cuando nuestro país atraviesa el momento más oscuro de su historia, donde los hechos parecen estarse precipitando ante nuestros ojos, cuando la gente más nos necesita para indicarles en el horizonte cuál es el camino para llegar a puerto seguro, es cuando quienes hacemos vida en la unidad debemos fortalecer los lazos que nos unen. La tarea aún no está hecha, y no es tiempo de jugadas adelantadas, de egoísmos, o de posiciones personalistas, es el momento de todos, es el momento del pueblo venezolano. Es tiempo de fortalecer los lazos que nos unen y de dejar de lado todo aquello que pueda hacernos peso para lograr empujar esta embarcación hasta la tierra firme.

Falta muy poco para lograr la conquista de los objetivos que nos propusimos, todos estamos conscientes de ello. También sabemos que el momento más oscuro de la noche es precisamente el que antecede a la salida del sol, a la llegada del día, del amanecer. Este es el momento que estamos viviendo los venezolanos, estamos ante el amanecer de un nuevo país que está allí al frente. El pueblo ha depositado su confianza en nosotros. Con esto en mente creo que es suficiente para entender que debemos trabajar con mayor fuerza unidos, cada uno desde su trinchera, para lograr el sueño de esa mejor Venezuela que todos nos merecemos.

Aarón Rodríguez Moro- @RodriguezAaron