Venezuela, uno de los temas de debate de la precampaña electoral española

Venezuela, uno de los temas de debate de la precampaña electoral española

El vicesecretario de Organización y Electoral del Partido Popular, Fernando Martínez-Maillo (c) y la vicesecretaria de Estudios y Programas, Andrea Levy (2d), durante su asistencia a la manifestación convocada por la representación de la Mesa de la Unidad Venezolana en Madrid. EFE/Fernando Villar
El vicesecretario de Organización y Electoral del Partido Popular, Fernando Martínez-Maillo (c) y la vicesecretaria de Estudios y Programas, Andrea Levy (2d), durante su asistencia a la manifestación convocada por la representación de la Mesa de la Unidad Venezolana en Madrid. EFE/Fernando Villar

La situación política y económica que atraviesa Venezuela se ha colado en la actualidad española, convirtiéndose en uno de los temas de debate principales de la precampaña electoral de cara a los comicios legislativos del 26 de junio, con posiciones encontradas entre los principales partidos. EFE

La presencia del país caribeño en la actualidad política española está ligada a la eclosión de Podemos (izquierda), la tercera fuerza política española con 69 diputados en el Congreso, a quien el gobernante Partido Popular (PP, centroderecha) y un amplio sector de la prensa acusan de recibir financiación del régimen chavista.

Esta denuncia pública ha sido desestimada en varias ocasiones por la Justicia española, aunque el Partido Popular ha usado esta acusación como crítica contra Podemos, que en abril estuvo cerca de alcanzar un Gobierno de alternativa con los socialistas, segunda fuerza política nacional, y cuyo fracaso ha abocado a España a nuevos comicios.





La controversia sobre esta cuestión ha emergido en paralelo al apoyo que las principales formaciones políticas españolas han mostrado a los presos políticos en Venezuela y la figura del líder opositor encarcelado Leopoldo López, que incluso cuenta con una resolución en el Congreso español, en la que se abstuvo Podemos.

En días pasados Madrid acogió una manifestación organizada por la Mesa de Unidad Venezolana y el Gobierno español concedió a dos familiares de López la nacionalidad española, que ya tienen sus padres, para que afronten mejor la “persecución política y judicial” que sufren, argumentó la vicepresidenta española Soraya Sáenz de Santamaría.

Las críticas por parte de los partidos políticos y del Ejecutivo español hacia Venezuela y su Gobierno se han acrecentado con la crisis económica que padece el país latinoamericano, con una inflación de 720 % prevista para 2016, según el FMI.

No es la primera vez que existen episodios de conflictividad entre ambos países: la tensión se remonta a los gobiernos de Hugo Chávez y José María Aznar (1996-2004), que posteriormente culminaría en el “¿Por qué no te callas?” que el rey Juan Carlos I espetó al presidente venezolano en la XVII Cumbre Iberoamericana de 2007.

En los últimos años, España ha retirado temporalmente en dos ocasiones a su embajador en Caracas por los insultos vertidos por Nicolás Maduro contra el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, mientras que el ministro de exteriores español ha convocado en cinco ocasiones al embajador venezolano en Madrid por distintos episodios de tensión, para expresar su queja.

Con este trasfondo y dos semanas antes de que comience la campaña electoral española, el líder del partido liberal español Ciudadanos – cuarta fuerza en el Congreso -, Albert Rivera, viajó ayer al país caribeño con el objetivo de “colaborar” y apoyar el diálogo político en la región.

Más polémica fue la visita del expresidente español Felipe González, (1982-1996), el año pasado, con el objetivo de visitar a varios opositores encarcelados y participar en su defensa, que no pudo llevar a cabo por desavenencias con las autoridades.

El número uno de Podemos, Pablo Iglesias, considera la visita de Rivera un “spot de campaña” electoral y con la que el político liberal quiere buscar votos para los elecciones del próximo 26 de junio.

Iglesias cree que usar la situación de otro país como arma arrojadiza en campaña electoral no es propio de “una democracia” como la española y pidió al Ejecutivo que intente “mediar” en la situación del país caribeño.