Jesús Alfonzo Sánchez: Hipocresía e inmisericorde, rasgos del comunista

Jesús Alfonzo Sánchez: Hipocresía e inmisericorde, rasgos del comunista

thumbnailJesusAlfonzoSanchezLa hipocresía es la actitud constante o esporádica de fingir creencias, opiniones, virtudes, sentimientos, cualidades, o estándares que no se tienen o no se siguen. La persona hipócrita finge cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente tiene o experimenta.

La inmisericordia o inmisericorde es un adjetivo que sirve para calificar a las personas que no se compadecen por nadie, entonces se puede decir de ellas que son personas frías que no sienten ninguna clase de empatía hacia las personas que los rodean. Por ende no tendrán ningún problema en pasar por sobre otras personas para cumplir sus objetivos. Las personas que son inmisericordes se puede decir que son personas que no tienen buenos sentimientos hacia nadie más que ellos mismos, porque estarán siempre pensando en su beneficio personal, además pueden llegar a ser crueles como Stalin, Lenin, Che Guevara, hermanos Castro, Mao, entre otros que fueron criminales sin piedad contra millones de seres inocentes se regocijaban con el sufrimiento y dolor de la muerte en serie. Así lo hizo Adolfo Hitler contra la raza judía en la segunda Guerra Mundial asesino a millones de mujeres, hombres y niños inocentes e indefensos en consecuencia se produjo el holocausto del pueblo judío a manos del ejército nazi fue un episodio histórico terrible.

“…El amor de esos hombres de izquierda, “feministas hasta que se casan; humildes hasta que se enriquecen; valientes detrás de un paredón o ateos hasta que el avión se viene en picada”, es un amor de carretera: fugaz. Amor que no le importa ver un pueblo hambreado, a merced de una impune criminalidad. Amor inmisericorde, de neonatos muriendo en hospitales (convertidos en pensiones); pranes que toman control de la sociedad; niñas pariendo sin dejar de serlo, niños perdidos en la droga sin haber abierto un libro e inocentes linchados con un bidón de kerosene (que ni hay). Cuando una sociedad llega a este nivel de anomia, de barbarie, de tragedia social, la grandeza, la nobleza y dignidad del hombre humilde, del “presidente obrero”, del buen revolucionario, es allanarse e impedir que la historia le condene, dimitiendo valientemente. Es el amor que salta hasta de una cabra loca (dixit Pepe Mujica), porque lo políticamente correcto, al decir del escritor español, Miguel Delibes, “es no-vivir con tanta facilidad”, pastando el poder…” párrafo del articulo de opinión de Orlando Viera Blanco (24-05-16).





En tiempo de la decadencia del poder político-económico cuando esta a punto de la caída o derrumbe los hipócritas, ambiciosos de formación comunista o de lectura marxista en fabricas o en universidades o cabeza caliente callejera o de guerrilla asaltante o mata policías tarifados de la vieja Rusia comunista o Cuba contra gobiernos democráticos de Venezuela, que luego se comportan como ratas cuando el barco se hunde, saltan mas rápido que atleta con garrocha sin dejar rastro de remordimiento con la cara bien lavada. Por ejemplo en primeros años del gobierno de Hugo Chávez atropellador, déspota, despilfarrador con proceso y después en revolución muchos altos funcionarios, ex constituyentes, ministros, diputados, gobernadores, embajadores, alcaldes, rectores cne, dirigentes políticos de confianza absoluta del comandante Chávez, saltaron la talanquera sin mirar hacia los lados, tales como: Luis Miquelena, Henry Falcón, Julio Cesar Reyes, Herman Escarra ( ahora abogado de Maduro), Vladimir Villegas, Ismael García, Isaías Baduel, Eduardo Manuitt, Ramón Martínez, Jorge Giordani, Luis Velásquez Alvaray , José Gregorio Gato Briceño, Héctor Navarro, Rafael Isea, Ana Elisa Osorio, Wilmer Azuaje, Rafael Simón Jiménez, Eduardo Semtei, Raúl Salazar, Alfredo Peña, Liborio Guarulla, Eladio Aponte Aponte. Manuel Rosendo, Florencio Porras, Luis Alfonso Dávila, Dicmar Evans,… y todos chavistas con hojilla en el rabo. Cada quien responderá ante el tribunal de juicio de rendición de cuenta.

Ahora estos militares chavista de fanatismo del socialismo siglo XXI, gritaban a todo pulmón “Patria o Muerte” venceremos. Hoy buscan el perdón del pueblo opositor democrático denunciando a Maduro como heredero traidor del chavismo para salvar sus alforjas y crímenes de lesa humanidad. Un caso sospechoso el Mayor General (R) Alcalá Cordones se distancia del gobierno, en mala hora para Maduro o al menos, pretende hacerlo. Luce interesante, pero que ver qué hay detrás de ese pronunciamiento, no es fácil creer en juramentos de militares partidarios o comunistoides incondicionales al gobierno, ni en aquellos hombres del poder que siendo cómplices de este corrupto y destructor gobierno, ahora pretenden convertirse en una especie de salvadores de la patria. Hay que meditarlo con mucha malicia política, porque es rara esa posición, a estas alturas de escasez de alimentos, medicinas, insumos, repuestos, sin agua potable ni energía eléctrica con hambre y enfermedades que causa la muerte repentina o súbita. Una verdadera Crisis Humanitaria.

El Madurismo cubano sabe que no le queda mucha fuerza dentro de la estructura del partido (PSUV) porque están atravesando un proceso de desintegración a punto de saltar la talanquera, lo único que le queda son las Fuerzas Armadas y esta no van a asumir el desastre provocado por Maduro quien funge de toñeco de Raúl Castro “no van a suicidarse en primavera”. Cuidado con la estrategia del gobierno moribundo de ganar tiempo con una oferta engañosa de los negociadores extranjeros del diálogo etéreo, Gobierno y MUD para no realizar este año el RR. Maduro y gabinete ofrece un cambio de 180 grados de gobernar, cuidado con el “gatopardismo” “cambiar todo para que nada cambie”, paradoja expuesta por Giuseppe Tomasi di Lampedusa (1896-1957).

El militarismo es un modo igual que el comunismo definido anteriormente ambos son chupa sangre y actúan como el escorpión, matan por naturaleza. En consecuencia llegó la hora de la ciudadanía civil, moralidad pública y de los grandes cambios institucionales. La civilidad al poder y los profesionales de las armas militares, tropas y policías en obediencia al poder civil constitucional tal cual como institucionalizo el padre de la Democracia venezolana, el ex presidente, Rómulo Betancourt en 1959. Así de las cosas.

@JASANCHEZ1145