Uno de los rostros más dramáticos de la escasez de alimentos que sufren los venezolanos se observa en la educación pública, sector que aunque debería ser prioritario, padece la más cruel desidia del gobierno de Nicolás Maduro y también del gobernador de Bolívar, Francisco Rangel Gómez, pues el Programa de Alimentación Escolar (PAE) no está funcionando como debería.
Así lo expresó el secretario de organización y finanzas de la Asociación Civil Unidad y Cambio, Juan José Pérez, quien detalló que en Bolívar la corrupción del PAE no permite que los platos de comida lleguen a los niños más necesitados en las escuelas correctamente.
Dicho programa atiende solo 100 colegios en todo el estado, pero en muchos casos el servicio alimentario es cobrado a través de cooperativas fantasmas y nunca se pone en los comedores de los planteles educativos públicos, todo gracias a la complicidad de funcionarios rojo rojitos corruptos e indolentes, pertenecientes a las diferentes zonas educativas de la gobernación.
“Incluso el mismo gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, hace gala fastuosa de la empresa regional Alimentos Bolívar, la cual no funciona y murió al nacer, pues existe en papeles sólo para hacer creer que en realidad se distribuye el PAE a todas las escuelas cuando no es así”.
“La realidad es otra, vemos el desvió de la comida que le corresponde a la alimentación educativa hacia zonas mineras controladas por bandas criminales con la anuencia del mismo gobernador, ya que es distribuida por sus allegados de mayor confianza”, apuntó Pérez.
Alimentación precaria
Aunado al desvío de los alimentos del PAE a las minas de Guayana mediante los canales de distribución mafiosos existentes en la Gobernación de Bolívar, en muchas escuelas donde este beneficio supuestamente se presta, los directores no permiten que se realice la debida contraloría social.
“Si llegan a cumplir con la alimentación escolar no es durante toda la semana, no le dan comida a los niños los cinco días de clases o no a todos los niños del plantel, pues hacen sospechosos recortes en el suministro de los alimentos”, dijo Pérez.
Sumado a ello, la poca alimentación que brindan a los pequeños estudiantes no es de calidad, ya que no cumple los parámetros nutritivos que debe tener la comida de un niño en crecimiento.
“¿Cómo es posible que niños en edad de la educación inicial desayunen una arepa sin nada? O si les dan almuerzo este sea solamente un colado de caraotas, o espagueti con salsa de tomate, me gustaría que los autócratas comunistas del gobierno me expliquen si esa dieta es una buena alimentación para los niños de la patria que recién inician su ciclo educativo”, manifestó.
En tal sentido, Juan José Pérez recordó que el sector alimentario sufre un altísimo impacto de la inflación y el desabastecimiento, por lo que los hogares pobres son agobiados en mayor medida por esta grave crisis, haciéndose aún más importante reforzar la alimentación escolar pública, ya que en muchos casos ella termina siendo el principal plato de comida diario de los infantes.
“Ya se están viendo las consecuencias de este desastre rojo rojito, con el aumento en el índice de desnutrición y enfermedades crónicas, niños que se desmayan en clases debido a lo mal que se está comiendo en amplios sectores del pueblo venezolano y guayanés, entonces advertimos que la alimentación escolar en Bolívar es otra mentira del gobierno”, concluyó.