Runrunes de este jueves 28 de julio de 2016

Runrunes de este jueves 28 de julio de 2016

Foto El Carabobeño
Foto El Carabobeño

ALTO
¿UN PRÉSTAMO?:

El país o mejor dicho el Banco Central de Venezuela recibió un “préstamo” de US$ 483 millones del Fondo Latinoamericano de Reservas (FLAR). Ha sido noticia pues como han hecho en 17 años se pasaron por encima la obligatoriedad de solicitar su autorización a la Asamblea Nacional. Pero este dinero del FLAR no es otra cosa que el capital aportado por Venezuela en ese fondo. En otras palabras, de derecho es un préstamo con garantía del aporte de capital venezolano, que de no pagarse se iría con nuestra participación de capital. En la práctica es un retiro de capital. Más aún, nos están prestando nuestro propio dinero y además debemos estar pagando intereses. El FLAR tiene $ 2 mil millones de 8 países (Bolivia, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Venezuela) de los cuales el nuestro aportó $ 482,5 millones. Añádale medio millón y así alcanza a nuestro rojito raspado de olla. Farsa tras farsa y Nico, con gríngolas para no ver de lado, aferrado a la silla…

MEDIO
¿ALLENDE 2?:





La Gaceta 40950 trajo el decreto con el que el gobierno ordena la “incorporación” de trabajadores de las empresas públicas, privadas, mixtas, de interés social a labores agroproductivas. Se trata de un régimen laboral transitorio, obligatorio y estratégico para fortalecer la producción nacional. Estará vigente por 60 días prorrogables. Esto se aplicó en Cuba con motivo de recoger la zafra azucarera, y se aplicó en el Chile de Allende, mediante un “voluntariado”, por el que estudiantes, profesionales y obreros en general eran llevados a colaborar con labores agropecuarias y otras de carácter estratégico ante “la guerra económica de la derecha”. Aquí los muy ramplones y escasos ministros del área económica, incluyendo al vicepresidente Istúriz, se les ocurrió la idea para destruir aún más las empresas privadas que al no tener materia prima para la producción han enviado los obreros a sus casas aunque pagándoles sus salarios. Obligarían así a llevarse ese personal especializado a las paupérrimas y quebradas empresas expropiadas so pena de prisión si no lo hacen. Aristóbulo, hoy el lateral, anunciaba que venía otro aumento de salario para así enfrentar la inflación. No terminan de entender que es echarle gasolina al fuego inflacionario. Cambio de programa económico es lo único que haría falta. ¿No entienden o lo hacen a propósito? ¿Cómo las arengas del locuaz Jorgito o el temible Diosdado contra el referendo que los aculilla? …

Y LAS MEDICINAS ¿PIRATAS?:

Otra investigación de www.runrun.es, esta vez a cargo de la periodista Gitanjali Wolfermann, sobre los riesgos que hoy tenemos al medicarnos arroja datos espeluznantes. Lo resumen tres subtítulos: “Los riesgos sanitarios que el Tribunal Supremo de Justicia buscaba blindar con su sentencia del 9 de junio de 2016 –evitar la exposición de la población a fármacos susceptibles de afectar la salud– son ya una realidad a causa de la aguda escasez”; “Los casos de adulteración, falsificación, venta ilegal, fallas en la calidad de los fármacos y la importación de genéricos cuestionados por la FDA se han incrementado. El Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel reporta 55 alertas sanitarias por circulación de medicamentos ilícitos, 27 por fallas en la calidad y 67 por cambios en la ficha de seguridad de los fármacos” y “La ley sancionada por el Parlamento para atender la crisis nacional de salud hubiera permitido recibir, de manera legal y segura, fármacos e insumos de la Organización Mundial de la Salud y de la Cruz Roja Internacional. Con el veto del TSJ a la recepción de ayuda humanitaria, miles de pacientes venezolanos se seguirán persignando y tomando lo que les den”. Informaciones de las Federación Farmacéutica Venezolana dan cuenta de cómo los medicamentos que han robado a los camiones de laboratorios y droguerías en la Autopista del Centro desde el 2015 aparecen en las redes sociales. Entre ellos hay hasta 300 principios activos en anticonceptivos y en medicamentos para enfermedades crónicas y de uso pediátrico.

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