Omar Ávila: Hambre soberana

Omar Ávila: Hambre soberana

thumbnailomaravilaHoy en día vemos como el gobierno, a través de su hegemonía comunicacional, pretende vender como un logro la compra de 16.120 toneladas de alimentos a Panamá, cuando la realidad es que eso no nos alcanza a los venezolanos para comer ni un día.

Nos encontramos ante un régimen desesperado buscando plata, y no es precisamente para comprar alimentos, sino para cancelar las deudas que se vencen en los próximos meses; por ello recurren al Fondo Latinoamericano de Reservas (FLAR) para tratar de saldar los 680 mil millones de dólares de la deuda que vence este mes.

También en los tres meses siguientes deben cancelar otros 3.650 millones de dólares, razón por la cual están buscando con los tenedores de bonos de PDVSA 2016-2017 ofrecer un intercambio y extender estos por 4 años más. De concretarse, duplicaríamos la deuda. Lo cierto es que hoy se gasta más del doble del presupuesto de la nación en pagar deudas que lo que se invierte en educación y más del triple que en salud.





Desde la AN seguiremos adelante trabajando sin descanso, a pesar de los obstáculos que por ahora nos coloca el régimen a través del TSJ, para aprobar los 42 proyectos de ley que tenemos previstos, para poder llevar a cabo el cambio que requerimos. Hemos aprobado 18, 17 de ellos, el Poder Judicial los ha boicoteado; sin embargo, lo importante es que ya están aprobados, y una vez que salgamos de este gobierno indolente, inmediatamente le daremos el ejecútese a todos y cada uno de estos.

Leyes como la denominada ley Candado, con la cual le vamos a poner un freno a los regalos, que durante la bonanza petrolera efectuaron de manera irresponsable a otros países y que hoy en día en menor proporción se siguen dando a pesar de la grave crisis política, económica y social que estamos atravesando.

Es propicio recordar que en regalía a 26 países se han ido 82 mil millones de dólares. Entre otros, se le dio electrificación a Cuba y Nicaragua, se le construyó una autopista a Jamaica, un hospital a Haití, se le dio -y se le sigue dando- petróleo gratuito a Cuba, convirtiéndose los Castros en los bachaqueros de nuestro petróleo. Todo este manejo irresponsable de nuestros recursos nos ha llevado a que hoy en día tengamos los niveles más bajos de reservas en la historia.

Soy un convencido de que será la presión social la que terminará destrancando este juego perverso e inhumano que tiene el gobierno con el TSJ contra los venezolanos, en la que han echado para atrás leyes tan importantes como la ley de Producción Nacional o la ley de Bono para Alimentos y Medicinas a Pensionados y Jubilados.

Por ello insisto en que no hay que descartar ninguna de las salidas constitucionales establecidas en nuestra Carta Magna, sino por el contrario, activar todos los caminos que prevé nuestra Constitución de manera simultanea, ya que el gobierno decidió evitar cualquier tipo de elección, porque saben que no cuentan con el respaldo del pueblo.
Por otro lado, la corrupción es tal, que al Banco Industrial de Venezuela le dieron 15 auxilios financieros, igualmente a otras entidades financieras quebradas, como los bancos Real, Confederado o el Bolívar Banco, que por cierto Chávez había apresado a varios de los responsables de este desfalco, como a Arné Chacón, Ricardo Fernández Barruecos, entre otros banqueros y que Nicolás Maduro, una vez que falleció “su padre” los liberó.

En el sector alimenticio no ha sido distinto.La Corporación Venezolana de Alimentos (CVAL,SA) se ha intervenido 5 veces y con ella, relanzamientos van y vienen sin que exista un responsable por la quiebra de las mismas, a pesar que desde el gobierno nacional le han inyectado suficientes recursos.

En fin, Nicolás y su combo ofrecieron soberanía alimentaria y hoy lamentablemente lo que tenemos en Venezuela, es hambre soberana.

Omar A. Ávila H.
Diputado a la Asamblea Nacional
Teléfonos: 04125999733 // 04166065484
Twitter e Instagram: @omaravila2010