La tensión persiste en Charlotte y Clinton pospone su visita a la ciudad

La tensión persiste en Charlotte y Clinton pospone su visita a la ciudad

Manifestantes protestan en el centro de Charlotte en Carolina del Norte (Estados Unidos). EFE
Manifestantes protestan en el centro de Charlotte en Carolina del Norte (Estados Unidos). EFE

 

La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton pospuso una visita que tenía prevista para el domingo a la ciudad de Charlotte, convulsionada tras el homicidio de un hombre negro por un policía, luego de que la alcaldesa les solicitará a los candidatos retrasar sus presencias allí, informó este viernes su campaña.

AFP





Horas antes, la campaña de Clinton señaló que la nominada demócrata visitaría la ciudad el domingo luego de varios días de manifestaciones de protesta por la muerte el martes pasado de Keith Lamont Scott, un hombre negro de 43 años, abatido por la policía.

“Después de discutirlo profundamente con líderes de la comunidad, hemos decidido posponer el viaje del domingo para no afectar los recursos de la ciudad”, subrayó la campaña de Clinton en un comunicado.

“Ella planeará realizar la visita el otro domingo, si las circunstancias lo permiten”, añadieron.

La alcaldesa de Charlotte, Jennifer Roberts, le había solicitado a Clinton y a su adversario republicano Donald Trump que retrasaran sus visitas a la ciudad, alegando que contaba con pocos recursos para garantizar su seguridad en estos momentos.

Tensión en las calles

La noche del jueves, cientos de personas marcharon por las calles de Charlotte, bajo la vigilancia de las fuerzas del orden pese a que desde las 00H00 hasta las 06H00 locales regía un toque de queda. Horas antes, además, el gobernador del estado de Carolina del Norte decretó el estado de emergencia en la ciudad y reforzó a las fuerzas de seguridad locales con la convocatoria de efectivos de la Guardia Nacional.

Durante las protestas, que exigían la publicación del video de la policía, se registraron episodios de violencia esporádicos con policías dispersando a un grupo de manifestantes con gases lacrimógenos.

El jueves, la policía aceptó mostrar a los padres de Scott las imágenes registradas durante su muerte. Pero no llegaron a esclarecer el principal punto de discordia entre la policía, que afirma que Scott tenía un arma en la mano, y sus familiares, quienes aseguran que se trataba de un libro.

El video debe ser publicado“, dijo el viernes la alcaldesa de Charlotte, Jennifer Roberts, en una rueda de prensa, asegurando que “es una cuestión de tiempo”.

La investigación aún está en curso, afirmó. “Si una parte (del informe) se hace pública antes, eso puede poner en riesgo la investigación en su conjunto”.

De su lado, el jefe de la policía local, Kerr Putney, sugirió que las imágenes no permitirían determinar eventuales responsabilidades.

“Si lo publico como está y sin ponerlo en un buen contexto, (el video) puede poner leña al fuego y empeorar la situación. Eso multiplicaría la desconfianza”, añadió.

Transparencia

La declaración parecía una respuesta a la lluvia de críticas contra la policía.

El secretario de Justicia de Carolina del Norte, Roy Cooper, estimó este viernes que el mejor medio de “buscar la verdad” es “hacer públicos los videos”.

La secretaria de Justicia estadounidense, Loretta Lynch, también se pronunció de forma indirecta en favor de la publicación de las imágenes.

No voy a dar órdenes a la policía por el momento”, dijo el jueves. “Siempre pienso que en las situaciones donde la información se hace pública, aunque esta información sea difícil de ver (…), el hecho de ofrecer una mayor transparencia es más útil que lo opuesto”.

Tal fue el caso hace una semana en Tusla, estado de Oklahoma, donde un hombre negro, Terence Crutcher, fue abatido el viernes pasado por la policía después de ser controlado por agentes y caminar con las manos en alto hacia su vehículo.

La policía autora del disparo mortal fue acusada el jueves de homicidio involuntario. Tras ser objeto de un orden de arresto, fue liberada el viernes después de pagar una fianza de 50.000 dólares.

Barack Obama, el primer presidente negro en la historia de Estados Unidos, se expresó brevemente este viernes sobre los hechos, mientras se prepara para inaugurar el sábado en Washington un museo dedicado a la historia afroamericana: la apertura de este establecimiento les permitirá a los estadounidenses “poner ciertos acontecimientos dentro de un contexto histórico”, dijo.

Las personas que ven lo que pasa en Charlotte y que visitarán este museo comprenderán mejor las reivindicaciones de los negros, lo cual les permitirá considerar con detenimiento y decir: “Comprendo, me compadezco“, añadió el mandatario.