Los militares venezolanos, que por años han disfrutado de fabulosos beneficios por sostener al chavismo, tienen una difícil decisión por delante ahora que el régimen de Nicolás Maduro ha sido declarado dictatorial, y deberán escoger entre respaldar a una abrumadora mayoría que aspira un cambio o avanzar en el tiránico camino que conduce a crímenes de lesa humanidad, publica El Nuevo Herald.
ANTONIO MARIA DELGADO
adelgado@elnuevoherald.com
La decisión que tomarán los distintos sectores que conforman las fuerzas armadas podría comenzar a verse en los próximos días, incluso tan temprano como este miércoles, cuando los venezolanos salgan a las calles a protestar –lo que ha sido llamado la “Toma de Venezuela”– para demandar del régimen que permita hacer un referendo para revocar el mandato de Maduro.
Las manifestaciones, produciéndose en momentos en que la oposición incrementa su tono desafiante hacia el chavismo, están siendo vistas como un escenario de alto riesgo para el régimen, que ha movilizado más efectivos de la Guardia Nacional para custodiar la capital del país.
Pero no son solo las previsiones de nuevas manifestaciones de protesta. También están las últimas acciones de la Asamblea Nacional, que el domingo declaró que Maduro había dado un golpe de Estado y que el martes decidió evaluar la responsabilidad política” de Maduro en “las graves violaciones a la Constitución, los Derechos Humanos y la Democracia”.
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