Con bolsitas de arroz, avena, azúcar y aceite solventan escasez de comida en El Tigre

Con bolsitas de arroz, avena, azúcar y aceite solventan escasez de comida en El Tigre

(foto Roimán Bejarano)
(foto Roimán Bejarano)

 

La venta de productos escasos en bolsitas plásticas o en forma de “teta” es un negocio que se ha incrementado en El Tigre. Así lo reseña eltiempo.com.ve

Por Marinelid Marcano Serra





La carencia en los anaqueles de arroz, azúcar, café, avena y aceite, y el desespero de los consumidores por conseguirlos motivó a vendedores a ofrecerlos a un costo 500 a 600 bolívares la bolsita.

Antes, lo que predominaba era la venta de azúcar y café. Ahora se sumaron a la lista la avena, el arroz y hasta aceite.

Betania Gómez ofrece estos productos frente a la plaza Bolívar.

“Bueno, es una forma de ayudar a la gente, porque esto no se consigue con facilidad a menos que compre los productos brasileños y son caros”.

Destacó que con eso tiene además un ingreso adicional a la venta de bolsitas de hortalizas en su puesto.

Lo que más le compran es azúcar y café, que volvieron a escasear de los comercios.

Luis Martínez señaló que con esas bolsitas solventa cuando no tiene dinero suficiente.

“Me ha tocado que se acaba todo en la casa y lo que tengo es para comprar así. Por lo menos se resuelve para el día”.

Acotó que con dos bolsitas de arroz puede preparar un almuerzo.

Manuel Rivas vende paqueticos de café en el mercado municipal con varios precios.

Tiene de Bs 400, Bs 500 y Bs 600, que exhibe en una mesa plástica.

“A unque sea un guayoyo se puede preparar con eso. La gente compra mucho porque no pueden estar sin café”.

El vendedor explicó que cuando se conseguía el producto en los negocios asiáticos compró y guardó, y por eso puede mantener el negocio. Aunque acotó que si aumenta de precio, se le hará cuesta arriba.

Variedad

La avena en hojuelas, que tampoco se consigue, los vendedores informales la ofertan en Bs 500.

El aceite comestible lo venden en envases plásticos, porque el regulado desapareció y el brasileño cuesta Bs 2.500.

Ana Fajardo señaló que adquirir los productos importados ya no es rentable porque suben de precio igual que los nacionales.

“Yo no soy partidaria de comprar alimentos así en bolsitas, porque se han visto tantos casos en que los ligan, que prefiero no arriesgarme. Pero sé que son una opción para quienes de verdad se les hace difícil comprar caro”.