El perdón en política es vital para lograr la Paz, por Jesús Alfonzo Sánchez

El perdón en política es vital para lograr la Paz, por Jesús Alfonzo Sánchez

thumbnailJesusAlfonzoSanchezNo es fácil perdonar para los humanos aun cuando Dios perdona a los pecadores en la tierra. Los seres humanos en estado de necesidad piden socorro, piden perdón a Dios como también Jesús su Hijo pidió perdón al Padre en la Cruz cuando dijo: Padre porque me has abandonado… perdonar es voluntad de Dios, y perdonarse los unos a los otros es mandato de Dios. En consecuencia no es desquiciado sugerir a los integrantes de la Mesa del Diálogo heterogéneo de Venezuela donde también está el representante del Vaticano que es un punto de equilibrio para llegar acuerdos concertados entre las partes del gobierno (Psuv) y la oposición (MUD) para alcanzar la Paz ante esta crisis humanitaria y política que vive el pueblo venezolano que necesita reconciliación y convivencia para apartar la venganza y el castigo por ahora, y acordar el Perdón Político entre las partes, aun cuando los delitos o pecados sean de extrema penalidad. Solo así se puede sellar la paz y la concordia por un tiempo transitorio hacia el camino electoral y así elegir con votos democráticos un gobierno de consenso en esta crisis de valores que padecen los venezolanos dentro y fuera del país.

Nadie en Venezuela está libre de delitos contra la cosa pública porque directa o indirectamente hay culpabilidad de acción, omisión o convalidación en el circuito político partidista, gubernamental, empresarial, laboral, comercial, religioso, académico, artístico, militar, deportivo, estudiantil, familiar en síntesis en la sociedad civil que ha sido arrastrada o victima de la descomposición social que data de décadas tras décadas que se ha transformado en una tradición de generación a generación. Desde la cuarta y hasta la quinta república los delitos de peculado, defalco, corrupción y destrucción generalizada es pan de cada día; unos de mayor o menor grado pero delitos de lesa humanidad que nunca prescriben hasta que se consolide un Poder Judicial probo e imparcial que se constituirá en el término de la distancia. Allí se juzgaran con legítima defensa a los culpables tal cual como va a suceder con la Paz acordada en Colombia con la FARC, Gobierno y las victimas durante más de cincuenta (50) años de criminalidad y narcotráficos sin piedad contra la mayoría de la población colombiana indefensa. Es urgente llegar a un acuerdo de esta naturaleza en la Mesa de Dialogo antes del 6 de Diciembre 2016, porque todos los venezolanos temen que los ofrecimientos de la MUD y el Gobierno de Maduro no van a llegar a ningún acuerdo para poner en libertad a los presos políticos y convocar el RR antes que finalice este año o realizar elecciones generales para elegir a todos los poderes públicos: Municipal, regional y nacional de Venezuela cosa que no se va a lograr, el presidente Maduro y compañía no aceptan porque están en peligro su libertad, interés económico y la seguridad de los suyos. Quien tenga ojos que vean y oídos para que escuchen el ruido en la calle que reclama: Basta de mentiras y engaños entre las partes que solo luchan para entronizarse en un juego perverso de ambiciones concertadas…
¡Ojala! La consagración cardenalicia de Monseñor Baltazar Porra Cardozo arzobispo de Mérida sea un anuncio de júbilo para los venezolanos amigos y enemigos de Baltazar Porra quien ha sido un tenaz luchador social, docente, que sacerdote, en la acción cívica, evangelio sin simbolismos, creencias e ideologías políticas en su trayectoria como pastor en el Estado Mérida y en la academia de la ULA, en Venezuela y Latinoamérica.

El mensaje del Papa Francisco en el acto del Vaticano el 19 de Noviembre de 2016 ante los nuevos Cardenales y ante el mundo católico dijo en la homilía: hizo referencia a la indiferencia y pidió a los nuevos purpurados que “sean misericordiosos” con los demás. “La elección, en vez de mantenerlos en lo alto del monte, en su cumbre, los lleva al corazón de la multitud, los pone en medio de sus tormentos, en el llano de sus vidas. (…) Amen, hagan el bien, bendigan y rueguen”, asimismo: “Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian, bendigan a los que los maldicen, rueguen por los que los difaman”. Lamentó que la época actual se caracteriza “por fuertes cuestionamientos e interrogantes a escala mundial” y criticó que en las sociedades contemporáneas exista “la polarización y la exclusión como única forma posible de resolver los conflictos”. En este sentido, se refirió a los inmigrantes y refugiados para subrayar que con frecuencia “se convierte en una amenaza”.





“Posee el estado de enemigo. Enemigo por venir de una tierra lejana o por tener otras costumbres. Enemigo por su color de piel, por su idioma o su condición social, enemigo por pensar diferente e inclusive por tener otra fe”. Y se mostró contrario a la indiferencia al prójimo y al “el virus de la polarización y la enemistad se nos cuela en nuestras formas de pensar, de sentir y de actuar”, trasladó este mensaje a los nuevos cardenales para alentarles a que fomenten la fraternidad en su labor diaria. “Venimos de tierras lejanas, tenemos diferentes costumbres, color de piel, idiomas y condición social; pensamos distinto e incluso celebramos la fe con ritos diversos. Y nada de esto nos hace enemigos, al contrario, es una de nuestras mayores riquezas”, expuso. “Como Iglesia, seguimos siendo invitados a abrir nuestros ojos para mirar las heridas de tantos hermanos y hermanas privados de su dignidad, privados en su dignidad”, Papa Francisco.

La ceremonia continuó con la promesa de fidelidad realizada por cada uno de los nuevos cardenales ante el Papa. Después, el pontífice pronunció sus nombres, les impuso la birreta cardenalicia y les entregó el anillo, símbolo de su compromiso universal con la Iglesia Católica.

Todo es posible en Venezuela “tierra de gracia” y nos conceda el perdón de Dios como regalo de Navidad y un año 2017 lleno de Paz y prosperidad. Así de las cosas.