Miles de personas esperan por reanudación de evacuaciones en Siria

Miles de personas esperan por reanudación de evacuaciones en Siria

AFP PHOTO / Youssef KARWASHAN
AFP PHOTO / Youssef KARWASHAN

 

Miles de personas esperaban el sábado, con hambre y en medio de un frío glacial, la reanudación de las evacuaciones en el último reducto rebelde de Alepo, mientras el presidente estadounidense Barack Obama denunció el “horror” que vive la segunda ciudad de Siria. AFP

Un responsable rebelde aseguró que se había alcanzado un acuerdo para reactivar las operaciones, pero no hubo confirmación por parte del régimen, que había suspendido el viernes estas evacuaciones después de que salieran unas 8.500 personas.





Según el emisario de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, quedan unos 40.000 civiles en la reducida zona que todavía controlan los insurgentes en Alepo así como entre 1.500 y 5.000 combatientes con sus familias.

La operación de evacuación, iniciada el jueves, estaba prevista para durar varios días. Una vez terminada, el régimen podría proclamar el control total de la ciudad, lo que supondría su mayor victoria desde el inicio del conflicto en el 2011.

En el barrio de Al Amiriyah, en parte todavía en manos de los rebeldes, y donde empieza el dispositivo de evacuación, miles de personas, entre ella niños, pasaron la gélida noche, con unas temperaturas de -6ºC, en medio de las ruinas de los edificios, constató el sábado un corresponsal de la AFP.

Sin agua ni comida, los habitantes sobreviven comiendo dátiles.

El ejército sirio suspendió el viernes el dispositivo tras asegurar que los rebeldes “no respetaban las condiciones del acuerdo”. Una fuente militar afirmó que “los rebeldes abrieron fuego, quisieron llevarse armas no incluidas en el acuerdo y partir con rehenes”.

Según el director del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman, la suspensión también se debe al bloqueo por parte de los rebeldes de la evacuación de los heridos de los pueblos chiitas prorrégimen de Fua y Kefraya, en la vecina provincia de Idlib (noroeste), asediadas por los insurgentes.

Los rebeldes siempre han querido vincular el destino de estas dos localidades al de Zabadani y Madaya, dos ciudades sitiadas por el régimen en la provincia de Damasco. También tendrían que llevarse a cabo evacuaciones en estas ciudades, añadió el responsable del OSDH.