Perros ofrecen terapia en hospital de Brasil (Fotos)

Perros ofrecen terapia en hospital de Brasil (Fotos)

En imagen del 17 de noviembre de 2016, la paciente de 20 años Gleisiane Oliveira observa a un perro Shitzu llamado Mille recibir un premio en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)
Gleisiane Oliveira observa a un perro Shitzu llamado Mille recibir un premio en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)

 

Cada semana, los pacientes en el Hospital de Apoyo de Brasilia reciben la visita de una raza especial de terapeutas: perros entrenados para ayudarlos a recuperarse de enfermedades o lesiones.

Grandes y pequeños, desde pastores alemanes hasta Shih Tzus, los perros se suben a la cama de algunos pacientes para acurrucarse durante una visita de 15 minutos. Los pacientes con mayor movilidad pueden llevar a los animales a sus clases de manualidades o jugar con ellos en los pasillos.





Creado para personas que presentan cáncer en etapa avanzada, que viven con enfermedades crónicas o que se recuperan de traumatismos, el programa de interacción canina ayuda tanto en la rehabilitación mental como en la física.

“Un poco de la tristeza desaparece”, dijo Jaqueline Castro, una paciente de 27 años con un trastorno degenerativo del sistema nervioso y quien recibe tres visitas al mes.

El proyecto inició aproximadamente hace cinco meses y ahora cuenta con 60 voluntarios que llevan semanalmente a sus mascotas al hospital en la capital de Brasil.

Pero no todo perro es aceptado: Solo cerca de uno de cada 10 canes cuyos dueños son voluntarios es aceptado, de acuerdo con Nayara Brea, coordinadora del programa.

Los animales deben pasar por exhaustivas revisiones de salud y someterse a entrenamiento, antes de poder ser llevados a las salas del hospital. Deben ser excepcionalmente tranquilos para evitar estresar a los pacientes. No se les permite ladrar, y deben ser amables con humanos y otros perros.

Un perro de terapia “acepta a los pacientes sin dudarlo”, afirmó Valeria Carvalho, quien lleva a su pequeña perra Schnauzer, Paola, al hospital. “La gente empieza a tener una perspectiva diferente sobre la vida, sobre la salud”. AP

En imagen del 17 de noviembre de 2016, Antonio Araujo, un paciente geriátrico de 67 años, recibe la visita de un perro Shitzu llamado Mille mientras descansa en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)
Antonio Araujo, un paciente geriátrico de 67 años, recibe la visita de un perro Shitzu llamado Mille mientras descansa en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)

 

En imagen del 17 de noviembre de 2016, Elizangela Santos, una paciente de cáncer de 35 años, acaricia a una perra Schnauzer llamada Paola en su cama en el Hospital de Apoyo en Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)
Una paciente de cáncer de 35 años, acaricia a una perra Schnauzer llamada Paola en su cama en el Hospital de Apoyo en Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)

 

En fotografía del 17 de noviembre de 2016, Priscila Cremer pasea a un pastor alemán llamado Pacato en su visita a otra paciente mientras realiza sus rondas como parte de un programa de terapia canina en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)
Priscila Cremer pasea a un pastor alemán llamado Pacato en su visita a otra paciente mientras realiza sus rondas como parte de un programa de terapia canina en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)

 

En imagen del 17 de noviembre de 2016, Herivania de Souza, una paciente de cáncer de 30 años, juega con un perro Shitzu llamado Mille que la visita en su cama como parte del programa de terapia canina en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)
Herivania de Souza, una paciente de cáncer de 30 años, juega con un perro Shitzu llamado Mille que la visita en su cama como parte del programa de terapia canina en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. (AP Foto/Eraldo Peres)

 

En imagen del 17 de noviembre de 2016, Nivaldo Lopes, un paciente geriátrico de 60 años, acaricia una perra Schnauzer llamada Paola en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. Cada semana, los pacientes en el hospital reciben la visita de una raza especial de terapeutas: perros entrenados para ayudarlos a recuperarse de enfermedades o lesiones. (AP Foto/Eraldo Peres)
Nivaldo Lopes, un paciente geriátrico de 60 años, acaricia una perra Schnauzer llamada Paola en su cama en el Hospital de Apoyo de Brasilia, Brasil. Cada semana, los pacientes en el hospital reciben la visita de una raza especial de terapeutas: perros entrenados para ayudarlos a recuperarse de enfermedades o lesiones. (AP Foto/Eraldo Peres)